Yolanda Díaz, Vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, se ha reunido hoy miércoles con el vicepresidente de Santander España, Juan Manuel Cendoya, en la sede del Ministerio.

Ayer lo advertimos, el primero fue Seat, después fue el turno de Telefónica y Mapfre, y la idea era que en los próximos días la lista aumentara: necesita a las empresas y a los empresarios. 

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Yolanda, que ha basado el desempeño de su cargo en ser abanderada de los derechos del trabajador, ha olvidado que, como Ministra de Trabajo, no se puede ejercer mirando siempre al mismo lado y demonizando continuamente el otro. Y ahora da marcha atrás.

Eso sí, no deja de presionar a las grandes empresas para que apoyen su reducción de jornada. Y es que el asunto ha ido demasiado lejos, lo dejó claro el Presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, que al finalizar su discurso basado en una crítica absoluta al Gobierno contó con el aplauso de todos los empresarios presentes en la Asamblea General de la CEOE.

Y es que Yolanda no puede basar el diálogo social en un continuo chantaje a la patronal. 

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Pero mientras Yoli continúa con su acercamiento y peloteo al Ibex, Sumar, su plataforma y proyecto político, parece que va por libre y decide ridiculizar en redes sociales el discurso de Garamendi y a todos los empresarios. 

Aunque, cuidado que Yolandísima ha agachado la cabeza, pero manda un mensaje, a través de sus inspectores, y lo podemos ver en el caso Nacho Cano, un ‘expolio laboral’ al que hemos hecho referencia en Hispanidad. Lo importante no es si Cano es inocente o culpable, sino amedrentar a los empresarios. Porque, no nos engañemos: si Trabajo quiere pillar a alguien lo más probable es que lo logre, porque es prácticamente imposible cumplir con toda la maraña legal vigente, como sucede con Hacienda. 

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Así que cuidadito con Yolanda.