¡Qué decepción con Rocío Monasterio! La líder de Vox no se ha atrevido a entrar en el fondo de la homosexualidad. Se ha quedado en lo políticamente correcto. Por ejemplo, trasladar el Orgullo Gay a la Casa de Campo.

La entrevista en ABC con la líder de Vox se lo pone aún más difícil a un católico para votar a Vox. No nos metemos en la cama de nadie, asegura. Pero sí en las conciencias. Por ejemplo, cuando alguien atenta contra la unidad de España. Creemos que el matrimonio es entre un hombre y mujer, pero no entramos en la orientación sexual de cada cual.

Rocío Monasterio asegura que Vox no se mete en la cama de nadie, pero sí se mete en las conciencias de todos

Pues mire usted, no, señora. Para un católico, los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados, tal y como asegura el Catecismo de la Iglesia católica y los homosexuales, que deben ser tratados con todo respeto y comprensión, están obligados a vivir la castidad.

Y es que, si a doña Patrocinio le importa un bledo la orientación sexual, entonces, ¿por qué razón no podrían casarse? ¿Por qué tendrían que conformarse con una unión civil?

Aún no han llegado al poder y ya se están volviendo políticamente correctos

¡Qué pena! Rocío Monasterio pasaba por ser la más seria, al menos en materia de principios, de toda la cúpula de Vox. Pero ya se ve que en Vox prima la unidad de España sobre los valores morales.

Vox lo pone muy difícil para que le voten los católicos. Aún no han llegado al poder y ya se están volviendo políticamente correctos.