En la actualidad millones de personas de todo el mundo son devotos de La Divina Misericordia. Este drama documental salió adelante gracias al descubrimiento de varios escritos originales del Padre Michał Sopoćko, el confesor de la Hermana Faustina Kowalska, e impulsora de esta devoción, así como inspirándose en el diario de 600 páginas que escribió la religiosa donde registró las revelaciones que recibió sobre la misericordia de Dios.

Porque, como ocurrió con los pastorcillos de Fátima, nada parecía indicar que sobre los hombros de una humilde muchacha, sin preparación y  dedicada a las tareas del hogar, recayera un mensaje tan trascendental y esperanzador como el de La Divina Misericordia, en que se afirma que Dios nos ama a todos y quiere que reconozcamos que Su misericordia es mayor que nuestros pecados.

El trabajo de Kondrat alterna secuencias recreadas de la vida de la santa, y de aquellos que creyeron en su mensaje, con imágenes de todo lo ocurrido y testimonios de personas actuales que explican cómo nació y se difundió el movimiento de la Divina Misericordia. Son bastante interesantes los testimonios de la Hermana Teresa de la Fuente, monja filipina de la Congregación de Nuestra Señora de la Misericordia, la Hermana Michaela Rak, monja polaca de la Congregación de Nuestra Señora de la Misericordia, responsable de la puesta en marcha de un hospicio en Vilnius, el Padre Joseph Roesch, Vicario General de los Padres Marianos de la Inmaculada Concepción, Fray Seraphim Michalenko, Postulador de la causa de canonización de Santa Faustina, el Obispo Krzysztof Nitkiewicz, Postulador de la causa de beatificación del Padre Michał Sopoćko y el Cardenal Henryk Hoser, exArzobispo de la Diócesis polaca de Varsovia-Praga.

Igualmente en el transcurso del trabajo se revelan los detalles del proceso de elaboración del famoso cuadro, tal como Jesús indicó a la Santa, y la azarosa vida que tuvo esa imagen durante el siglo XX. Además, aporta datos científicos que confirman la similitud entre los rasgos faciales del Cristo de la imagen, con los que aparecen en la Sábana Santa de Turín y en el sudario de Oviedo.

El largometraje también se toma su tiempo en destacar el importante papel que jugaron el Beato Padre Michał Sopoćko (confesor de Faustina) y el Papa San Juan Pablo II en la difusión del mensaje de la Divina Misericordia.

Para: los que quieran conocer más datos de la devoción de La Divina Misericordia.