La eólica y la fotovoltaica son las principales renovables que se quieren impulsar en España, pero a falta de subastas, la especulación aumenta
La burbuja y la especulación de las energías renovables se mantiene al alza en España. La última muestra se ha podido ver en la venta del 75,1% de Viesgo a EDP por parte del fondo de inversión australiano Macquarie.
En concreto, la operación ha alcanzado un valor de 2.700 millones de euros y engloba: 500 megavatios (MW) de generación renovable y dos centrales de generación térmica (en proceso de desmantelamiento) y con casi 1 GW de potenciales derechos de acceso a la red. En su día, Endesa también mostró interés por esta cartera de la energética de origen cántabro, pero ofrecieron, como máximo, 2.000 millones. Recuerden que EDP está controlada por los chinos de China Three Gorges (CTG), dueños del 21,47% de la energética portuguesa.
A Macquarie le ha salido el negocio redondo: entró en 2015 junto a Wren House (propiedad del fondo soberano de Kuwait -Kuwait Investment Authority-) en Viesgo, cuando la adquirieron a la energética alemana E.On por 2.500 millones. Ahora, meses después de hacerse con el 100% al comprar el 40% de KIA, ha ingresado 3.433 millones, según informó El Economista: al paquete que ha vendido recientemente a EDP, se suma el que vendió a Repsol en noviembre de 2018 por 733 millones (su comercializadora de luz y gas -con 750.000 clientes-, y 2.350 MW repartidos en tres centrales hidráulicas y dos ciclos combinados).
A Macquarie le ha salido el negocio redondo con Viesgo: con las ventas de paquetes a Repsol y a EDP ya ha ingresado más de lo que pagó cuando entró en 2015
A estas operaciones de Macquarie hay que sumar la venta de activos de ciclo combinado (850 MW) y una parte de la cartera de clientes de electricidad de EDP en España a la petrolera francesa Total por 515 millones. Así, esta última se ha convertido en la cuarta eléctrica de nuestro país.
Pero a la burbuja de renovables, se suma la inflación de los precios… y con ello, la especulación. En el sector de las eléctricas tradicionales, se habla de que el precio lógico de una licencia con conexión a la red es de 100.000 euros/MW y todo lo que sea superar esa cifra es una ruina. Sin embargo, los nuevos operadores están pagando cifras mucho más altas: por ejemplo, Fernando Samper (también conocido como ‘el charcutero’ por ser miembro de la familia propietaria Grupo Jorge, la tercera cárnica española), fundador de Forestalia, dio la sorpresa al hacerse con 1.924 MW en las subastas de 2016 y 2017 y ha llegado a vender a un precio de 400.000 euros/MW. Además, las nuevas comercializadoras de luz intentan vender continuamente clientes a las grandes eléctricas, pues son las que se están adjudicando subastas.