Carrefour sigue apostando por el crecimiento inorgánico tras los buenos resultados económicos de 2020
Carrefour ha vuelto a salir de compras, después de que comenzara el año con el intento de adquisición por parte de la canadiense Alimentation Couche-Tard, oferta que al final se retiró gracias al Gobierno galo, que sí sabe proteger a sus empresas. Tras adquirir Supersol en España y tiendas de Makro en Brasil en 2020, entre otras operaciones, ahora se hace con el Grupo Big en dicho país.
El grupo de distribución francés realizó siete compras el año pasado, valoradas en 760 millones de euros, la mayoría en sus tres principales mercados (Francia, Brasil y España), donde obtuvo unas ventas de 37.937 millones de euros, 12.711 millones y 10.013 millones, respectivamente. Por cercanía, destaca la compra de 172 supermercados de Supersol, propiedad del grupo lituano de retail Maxima Group, en España por 78 millones, operación que cerró la semana pasada y le permitirá acelerar su expansión en formatos de conveniencia (Express), supermercado (Market) y Supeco. “La integración de Supersol refuerza nuestra apuesta por la omnicanalidad, nos permite estar presentes en todos los formatos acelerando nuestra estrategia de crecimiento”, subrayó el director ejecutivo de Carrefour España, Alexandre de Palmas. Y no hay que olvidar que en España tiene la segunda mayor cuota de mercado en la distribución alimentaria, con un 8,4% en 2020, tras la española Mercadona (24,5%) y por delante de la alemana Lidl (6,1%) y de DIA (5,8%).
Carrefour también adquirió 30 tiendas de Makro en Brasil, 224 tiendas de conveniencia Wellcome en Taiwán, 107 tiendas de productos orgánicos Bio c’Bon y las startups Potager City, Dejbox y Bioazur en Francia. A todas estas operaciones se suma ahora la compra de Grupo Big, propiedad de la empresa de capital riesgo estadounidense Advent International y el gigante estadounidense de la distribución minorista Walmart, valorado en unos 1.100 millones. Grupo Big es la tercera empresa de distribución minorista en Brasil, cuenta con 387 establecimientos y tuvo unas ventas brutas de 3.784 millones en 2020, frente a los 489 establecimientos de Carrefour Brasil y los 11.444 millones en ventas. Por tanto, si esta última operación llega a buen puerto, el grupo de distribución francés se colocaría con 876 tiendas, una facturación de 15.228 millones y 137.000 empleados en dicho país sudamericano.