Chocolates Valor ha puesto ‘en valor’  -nunca mejor dicho-  su músculo financiero (ganó 12,2 millones el año pasado, un 10% más) y ha cerrado la compra del mayor chocolatera de Portugal, ‘Imperial’, que hasta ahora pertenecía a la firma de fondos de inversión lusa Vallis Capital Partners, informa El Economista.

La operación supone el salto internacional de la chocolatera alicantina fuera de España, ya que es la primera de este tipo que lleva a cabo la empresa familiar fuera de España.

La firma busca impulsar su plan de internacionalización, por el que ya vende sus productos en 60 países. Imperial, con casi 90 años de historia, posee marcas como Regina, Jubileu, Pantagruel, Pintarolas o Allegro, entre otras, añade El Economista.

Además, el fabricante portugués que cuenta con un volumen de facturación de 33 millones de euros, fabrica algunas referencias de chocolate negro para la cadena española de supermercados Mercadona.

La compra de Imperial es la segunda adquisición en la historia de Chocolates Valor, que en 2013 adquirió la planta chocolatera de Ateca (Zaragoza) y las históricas marcas Huesitos y Tokke, y la primera operación de carácter internacional para la compañía.

El objetivo es que la transacción, que se encuentra también sujeta a la aprobación de las autoridades, se complete en las próximas semanas, explica El Economista.