Sede de Duro Felguera en Gijón, que actualmente está en venta
Parece que Duro Felguera está en el límite, al borde mismo del abismo, pues ha pedido a la banca acreedora la conversión del 100% de la deuda (unos 200 millones de euros) en capital y esta última se lo está pensando… La razón de esta reflexión no es otra que el hecho de que perdería todo si la compañía acaba en concurso de acreedores... y a lo mejor de esta forma también.
La ingeniería asturiana que preside Acacio Rodríguez lleva tiempo pidiendo una nueva línea de avales por 100 millones, pero sin obtener ningún éxito, y ha anunciado algunas desinversiones (su filial Epicom y su sede de Gijón están en venta). El pasado martes, se reunió con la banca acreedora para abordar un plan de viabilidad, que en realidad se resumió en una única propuesta: condonar toda la deuda, convirtiéndola en capital.
La ingeniería asturiana lleva tiempo pidiendo una nueva línea de avales por 100 millones, pero sin ningún éxito, y ha anunciado algunas desinversiones
Las siete entidades acreedoras (Santander, BBVA, Bankia, Sabadell, Caixabank, Liberbank y Banco Cooperativo) están valorando qué hacer. Y es que si la compañía acaba en concurso de acreedores, perderían todo: la ingeniería valdría lo que valen sus contratos… los cuales ahora mismo no están en su mejor momento (la contratación se situó en 87 millones en los nueve primeros meses y la carga de trabajo ascendía a 558 millones, pero si no hay liquidez, no puede acometerla).
Y a todo esto se une el hecho de que Duro Felguera no consigue atraer el interés de ningún fondo ni socio industrial interesado en invertir en la compañía.