Tras las últimas elecciones presidenciales en EEUU, el fiscal general, William Barr, ha autorizado a los fiscales federales de todo el país a que investiguen “denuncias sólidas” de supuestas irregularidades en la votación, antes de que se certifique la elección presidencial de 2020, que ha dado la presidencia al demócrata Joe Biden, publica Infobae.

Barr escribió que las investigaciones “pueden llevarse a cabo si hay denuncias claras y en apariencia creíbles de irregularidades que, de ser ciertas, pudieran afectar el resultado de una elección federal en un estado concreto”.

Tras la autorización de William Barr, dimitió el director de delitos electorales, Richard Pilger. En su opinión, la orden de Barr “deroga una norma de 40 años de no interferencia (federal) en investigaciones de fraude electoral durante el periodo anterior al de certificación de las elecciones”. 

Lo que se coulta es que Pilger fue nombrado por Barack Obama pero Trump le mantuvo durante todo su mandato y ahora ejerce como saboteador del Gobierno en ejercicio. Ojo no dimite porque no esté de acuerdo con los resultados de una investigación sobre la limpieza del recuento electoral. Dimite porque se niega a investigar. Y sobre todo, porque sabe que su dimisión tendrá poco recorrido: la Administración Biden le aplaudirá en cuanto llegue. 

Ahora, los estados tienen hasta el 8 de diciembre para resolver las disputas electorales, incluyendo recuentos e impugnaciones judiciales sobre los resultados. Los miembros del Colegio Electoral se reúnen el 14 de diciembre para formalizar el resultado.

Los estados tienen hasta el 8 de diciembre para resolver las disputas electorales

A todo esto hay que añadir que la cadena conservadora Fox News cortó la emisión de la rueda de prensa de la portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, cuando denunciaba "fraude" en la victoria de Joe Biden, recoge Antena 3.  Neil Cavuto, presentador de Fox News cortó la emisión y dijo: "Guau, guau, guau. Creo que tenemos que ser muy claros: está acusando a la otra parte de permitir el fraude y el voto ilegal. A menos que tenga más detalles para respaldar eso, no puedo seguir mostrándoles esto". Es decir, es el periodista quien decide lo que es verdad o es mentira.

Eso mismo hicieron la semana pasada las grandes cadenas norteamericanas, ABC, CBS y NBC... ¡con el mismísimo presidente!