• Sorprende la marcha de Francisco Sancha, figura clave del Popular en los últimos 20 años.
  • Y el futuro de Miguel Ángel Moral, pieza clave de la última etapa del Popular, que algunos sitúan dentro del Santander.
  • Moral estuvo en la negociación última de la noche de autos.
  • En cualquier caso, estamos hablando de un Comité de Dirección provisional.
Borrón y cuenta nueva. Es lo que ha hecho el Santander nombrando al nuevo Comité de Dirección del Popular. De los doce miembros que componían el anterior comité solo permanece Rafael Muñoz, director de Negocio del banco. El resto, fuera. Y de todos ellos sorprende la marcha de Francisco Sancha, hasta ahora director de Negocio Inmobiliario y Transformación de Activos. Sin duda, Sancha ha sido una figura clave del banco en los últimos 20 años. Carlos Garachana, el que fuera responsable de Recuperaciones cuando la integración con Banesto, será el sustituto de Sancha. Es el descabezamiento del Popular. Salvo Muñoz, los otros siete miembros del nuevo Comité que provienen del Popular no estaban en el anterior Comité. Además, la mayoría son profesionales de la segunda línea directiva. Por ejemplo, Rafael Galán, ahora encargado de la Dirección Financiera, era subdirector general financiero del Popular desde septiembre de 2016. Un Comité de catorce miembros, dos más que el anterior, en el que seis directivos son del Santander. Precisamente, una de las incógnitas que planean sobre la antigua cúpula del Popular es el futuro de Miguel Ángel Moral, secretario general técnico del banco desde 2013 y, antes, directivo de Catalunya Caixa. Lo cierto es que Moral ha jugado un papel clave en la última etapa del Popular. Tanto es así, que estuvo en la negociación de la noche de autos, en la que, como adelantó Hispanidad y ante la sorpresa de propios y extraños, Saracho y su equipo se empeñaron en negociar a la baja. En cualquier caso, el nuevo Comité de Dirección del Popular, que preside Juan Olaizola -no confundir con el presidente del Popular, Rodrigo Echenique- tiene los días contados, como lo tiene la marca Banco Popular. Su duración dependerá de la integración tecnológica del banco, es decir, cuando un cliente del Santander pueda entrar en una oficina del Popular para contratar un producto Santander. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com