Ana Botín, presidenta del Santander y de la Federación Bancaria Europea, está por el ahorro energético
De un tiempo a esta parte, Ana Botín no deja escapar la oportunidad de mostrar su feminismo que, si no ha llegado todavía a la cima, le falta poco. Y este miércoles, durante el encuentro con la prensa para presentar los resultados del banco en 2019, lo ha vuelto a hacer. Primero, desdoblando el lenguaje en varias ocasiones, al referirse a “los españoles y las españolas”. Y después, cuando le han preguntado por el acceso de mujeres a puestos directivos, Botín ha asegurado que la mayoría de directoras regionales del banco en España son mujeres, para terminar con la puntilla: “Tampoco se trata de discriminar a los hombres. Nosotras no somos así”.
El segundo mensaje (subliminal) que ha querido transmitir la presidenta del Santander es que ella delega todo o casi todo dentro del banco. Un ejemplo: se enteró por la prensa de la adquisición, hace cinco días, del portal de compraventa de vehículos Coches.com.
En cuanto al Gobierno de Pedro y Pablo, varias consideraciones: si reforma el mercado laboral, debe hacerlo “con diálogo y consenso, mirando datos sobre cómo puede impactar en confianza y creación de empleo. Hay muchos puestos de trabajo que están hoy y que no estarán en el futuro”, ha señalado.
A Botín no le gusta la idea de un impuesto específico para la banca, como es lógico. “No creo que seamos uno de los sectores que merezcan un impuesto específico en este momento”, ha explicado, para luego dejar claro que “si hay que subir impuestos, muy bien, pero no deberíamos ni tributar dos veces por lo mismo ni pagar sobre pérdidas”. También ha tenido palabras para los gigantes tecnológicos: “Soy la que más defiendo una fiscalidad justa, pero hay empresas que aprovechan una estructura que no está diseñada para el nuevo modelo económico”, ha afirmado.
“No vamos a comprar ningún banco”. Así ha zanjado Botín la posibilidad de participar en la reactivación del proceso de consolidación del sector, tal y como están reclamando, tanto desde el BCE como desde el Banco de España. Ni en España ni en Europa, principalmente porque antes se deberían cambiar muchas normas actualmente en vigor. Pero incluso si se cambiaran, “no estaríamos interesados”.
Y sobre la adquisición del Popular, Botín ha reconocido que se equivocó en el momento del ciclo: pensaba que el BCE iba a subir los tipos de interés. Por eso, porque finalmente no lo hizo, según ella, la aportación del Popular al grupo no se ha hecho visible en 2019 y se retrasa hasta 2020 o 2021.
Por cierto, sobre su participación en el programa de Jesús Calleja, todo es muy positivo, también en lo personal: “Ahora es mi amigo y lo pasamos muy bien”, ha dicho.