El madrileño Gonzalo Urquijo (60 años) ya tiene nuevo empleo, siendo uno de los pocos afortunados que lo consigue en esta crisis económica que ha provocado el coronavirus, en la que el paro se ha disparado. Y no es un trabajo cualquiera: ha sido nombrado nuevo CEO de Talgo… tres meses después de que fuera cesado como presidente de Abengoa y cuando han pasado poco más de dos meses desde que dimitió como presidente de Abenewco 1, filial de Abengoa.

Urquijo asume las funciones que tenía José María Oriol desde el año 2002, quien ahora pasa a ser vicepresidente no ejecutivo del fabricante ferroviario, y por tanto, compartirá la gestión con el presidente ejecutivo, Carlos Palacio Oriol. Por cierto, se da la casualidad de que el apellido Urquijo no es desconocido en Talgo: el abuelo de José María Oriol era José María de Oriol y Urquijo., primogénito de José Luis Oriol y Urigüen (fundador junto a Alejandro Goicoechea de la compañía en 1942). 

Como nuevo consejero delegado de Talgo, Urquijo tiene la misión de contribuir a seguir impulsando la estrategia actual de crecimiento de la compañía a través de la internacionalización y diversificación (en este aspecto, CAF puede servir de inspiración). “Es un honor para mí convertirme en consejero delegado de una compañía de referencia en el sector con casi 80 años de innovación a sus espaldas como es Talgo, y perfectamente posicionada para liderar el transporte sostenible de pasajeros en un momento de transformación del sector transportes, en que el camino hacia una mayor eficiencia y menores emisiones es irreversible”, ha señalado.

Palacio Oriol ha destacado que “la larga trayectoria como gestor industrial de Gonzalo, así como su sólida experiencia de liderazgo, ayudará a dar continuidad a la estrategia de Talgo para continuar impulsando su crecimiento y sostenibilidad en el largo plazo”. Urquijó inició su carrera profesional en el sector bancario (Citibank -en el que, por cierto, también trabajó José María Oriol- y Crédit Agricole), de ahí pasó al sector siderúrgico (grupo Aristrain, Aceralia, Arcelor -tres compañías que hoy forman parte de ArcelorMittal, para la que también trabajó) y después pasó en 2016 a Abengoa y más tarde, a su filial, Abenewco 1. Esperemos que en Talgo le vaya mejor que en esta última, pues su situación económica es muy distinta, aunque arrojó pérdidas en 2020 por culpa del coronavirus. 

Un último apunte: el principal accionista es Pegaso Transportation International que controla de forma directa el 35,016% del capital. De esta sociedad, el fondo Trilantic Capital Management posee un 63% y la familia Oriol, un 20,3%. Además, en el accionariado de Talgo se encuentra la aseguradora Santa Lucía, dueña del 4,912%.