Herbert Diess, CEO del grupo Volkswagen
Volkswagen se consolida como el grupo automovilístico número uno del mundo, pues ha vendido 10,97 millones de coches en 2019. Esta cifra supone un 1,3% más que en el año anterior, cuando sus ventas ascendieron a 10,83 millones, superando a la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi (10,76 millones) y el grupo Toyota (10,36 millones).
El gigante alemán lleva tres años en el primer puesto del podio, concretamente desde 2016, cuando le arrebató el liderazgo a Toyota. El grupo nipón sigue estando entre los más vendidos, pero en 2018 pasó del segundo al tercer escalón, al ser superada por la alianza franco-nipona.
Volkswagen ha aumentado sus ventas globales un 1,3% en 2019 respecto al año anterior, pese a la disminución de los mercados en general. En concreto, destacan los incrementos registrados en Europa (+3,9%, hasta 4,55 millones de vehículos) y en América del Sur (+3,2%, hasta 608.600). Por unidades vendidas, el viejo continente lidera la distribución geográfica, sobresaliendo Alemania, con 1,364 millones (+6,2%); seguido de Asia, donde China supone 4,23 millones (+0,6%).
Por marcas, Volkswagen (VW) lidera el ranking del grupo que tiene como CEO a Herbert Diess, con casi 6,28 millones de vehículos vendidos (+0,5%), pero ha sido la filial española -Seat-, y Porsche, las que han tenido los mayores aumentos: del 10,9% y del 9,6%, hasta 574.100 y 280.800 unidades, respectivamente. Por su parte, Audi ha vendido 1,84 millones de coches (+1,8%), seguida de la filial checa -Škoda-, con 1,24 millones (-0,9%). Y por último, las ventas de vehículos comerciales de VW han ascendido a 491.600 (-1,6%), a las que se suman los 142.800 (+4,6%) camiones de Man y los 96.500 (+3,1%) de Scania.
Cifras en las que parece que no ha influido el primer gran juicio por el ‘dieselgate’, el escándalo que estalló en septiembre de 2015 debido a la manipulación del software para camuflar emisiones contaminantes. Un gran juicio que empezó hace unos meses en el tribunal de Brunswick (Alemania) y que reúne unas 400.000 demandas, pero parece que habrá pocas consecuencias: el grupo está negociando un acuerdo amistoso, aunque el escándalo ya le ha costado más de 30.000 millones de euros en gastos jurídicos, multas e indemnizaciones (en su mayoría en EEUU). Eso sí, este martes se ha conocido que la Fiscalía de Brunswick ha acusado a seis altos cargos por este caso, que se suman al propio Diess; al presidente del consejo de supervisión, Hans Dieter Pötsch, y al expresidente del grupo Martin Winterkorn, que fueron acusados por la justicia alemana el pasado septiembre.