El simpático osito sigue feliz en Londres, viviendo con su familia “humana”, Los Brown, hasta que le llega un inquietante mensaje de que su querida tía Lucy, la osa que le crió, ha desaparecido del Hogar para Osos Jubilados y nadie sabe de su paradero. Será entonces cuando él y la familia Brown, viajen a las selvas de Perú para buscarla, teniendo como única pista un punto marcado en un enigmático mapa.

Como en las anteriores películas hay humor blanco a raudales para que esta película sea disfrutable por gente de todas las edades. Al igual que en las dos anteriores películas, repiten en los principales papeles Hugh Bonneville, Julie Walters, Jim Broadbent e Imelda Staunton, mientras que Ben Wishaw vuelve, en el doblaje original, a poner la voz al osito Paddington. Pero hay más anécdotas a destacar, porque la película tiene toque español al figurar en un papel secundario, pero fundamental, Antonio Banderas y la conocida actriz Emily Mortimer sustituye a Sally Hawkins encarnando a la mamá de la familia Brown. Aunque quien se “sale”, con una actuación divertidísima haciendo de mala-malísima, es la oscarizada actriz Olivia Colman, que interpreta a una enigmática monja que dirige el Hogar de los Osos retirados. Por cierto, que, durante la sesión de fotos para el cartel de la película, Colman pidió, para meterse en el papel, que le pusieran la banda sonora de Sonrisas y lágrimas. 

Desde el comienzo de esta nueva aventura tenemos claro que Paddington vivirá momentos enloquecidos que harán las delicias de pequeños y mayores, pero siempre a la búsqueda de su propia identidad, sus orígenes y su hogar. Y en esta comedia familiar vuelve a plantearse una pregunta básica cuando hablamos de orígenes, ¿de dónde es uno: de donde naces o donde paces?

La película, tal como plantean sus responsables, habla de pertenencia y la decisión sobre qué es el hogar, de lo que cada uno entiende por ese lugar donde sus miembros son valorados por lo que realmente son y no por lo que aportan. Y siendo como es una película para todos los públicos, tiene un contenido inequívocamente familiar sobre el amor verdadero que es el más desinteresado.

Supone el debut como director de Dougal Wilson, que ha querido ser continuista con lo que hizo Paul King en las dos primeras películas. 

Para: los que quieran disfrutar en familia de una película con buenas vibraciones.