Sigue argumentalmente la estela de la película de acción real de John Fravreau, de 2019, un relato más dramático y adulto que la versión animada clásica de El Rey León, que se estrenó hace 30 años. La dirección de esta precuela ha recaído en Barry Jenkins, conocido por el Óscar que obtuvo a mejor película su dramática Moonlight. “Siempre quise tener un hermano” es la frase significativa de este film.
La familia de Simba está a punto de crecer de tamaño cuando el primate Rafiki recibe el encargo, del propio monarca, de ilustrar a la pequeña leona Kiara sobre quién fue su abuelo Mufasa y cómo se convirtió en rey. Tendrá como ayudantes para este relato nada menos que a los divertidos Timón y Pumba. 
La historia arranca tras una gran inundación que separa al cachorro Mufasa de sus padres. Perdido y de alguna forma huérfano, conocerá a otro cachorro, Taka, heredero de un linaje real que se empeñará, a pesar de las reticencias de su padre, en que se convierta en su hermano. Mufasa pronto demostrará tener unas grandes virtudes, entre ellas el valor. Ambos comenzarán un viaje extraordinario que sacará a la luz lo que llevan dentro y que producirá roces entre ellos.
Al igual que en la película de Favreau, de hace cinco años, se ha hecho una gran apuesta por una animación hiperrealista al combinar técnicas cinematográficas de acción real con imágenes fotorrealistas generadas por ordenador, todo ello dentro de un relato “shakesperiano” sobre la ambición, los celos y la envidia, donde no falta la violencia, de ahí que este film sea apropiado para niños de más de unos 8 años. De hecho, hay muy poco humor en esta propuesta y casi entra “de tapadillo” cuando salen en pantalla Timón y Pumba. Se repite el mensaje primigenio de respeto hacia las leyes de la naturaleza (el ciclo de la vida) mientras apuesta por la elección de un líder no por nacimiento sino por méritos propios.
La película, siendo visualmente de una calidad técnicamente perfecta, posee una banda sonora bonita, de Dave Metzger y unas canciones agradables, de Lin- Manuel Miranda, pero que adolecen del toque étnico, que nos situaba en los sonidos de África, de la versión animada original y que se han convertido, posiblemente, en una de las bandas sonoras de mayor calidad en la historia de los estudios Disney. ¿Quién no recuerda la simpática Hakuna Matata?
Una curiosidad que quizás se pregunten muchos admiradores de estos filmes de animación en acción real, en este caso, el primer paso de este largometraje fue grabar las voces de los protagonistas y, a partir de ahí, ya se dibujaron y calibraron las imágenes. En la versión original entre los actores dobladores se encuentra el magnífico actor nórdico Mads Mikkelsen que pone voz a Kiros, un poderoso león que es el malvado de la trama. 

Para: los que les guste El Rey León en sus dos versiones.