La vida ha llevado a tres amigos por caminos muy diferentes: uno es un íntegro guardia civil, otro un depositario judicial y, el último y más veterano, un narco de bajo perfil. Pero cuando en el lugar donde habitan, la bahía de Cádiz, entra un nuevo jugador, un narcotraficante mexicano y su peligrosa gente, la vida de los tres amigos pende de un hilo cuando se va a producir el traslado rutinario de un yate incautado a un peligroso cártel.
La película, de alguna forma, recuerda hechos recientes y dolorosos como la muerte de dos guardias civiles arrollados por una narcolancha y pone sobre el tapete cómo operan las mafias de la droga y las dificultades de las fuerzas del orden para pelear con pocos medios contra “gentuza” que, desgraciadamente, los tienen todos debido al lucrativo e ilegal negocio al que se dedican. La película también toca otro asunto crucial en esa zona, “las tentaciones” de algunos ciudadanos de hacer dinero rápido. 
Muy violento, este trepidante thriller de suspense ha sido dirigido por Albert Pintó, uno de los directores de las famosas series televisivas La Casa de Papel, Berlín y el reciente estreno de Nowhere, basándose en un guión escrito por Fernando Navarro (Verónica, Bajo cero). En el mismo, Pintó logra provocar tensión en el espectador en varias secuencias, fantástica, por ejemplo, la que discurre en una autopista. Sin embargo, se han cargado un poco las tintas en el histrionismo de los narcos mexicanos que juegan en otra dimensión. 

A Luis Zahera, al que habitualmente vemos en papeles de malvado o buscavidas, en esta ocasión le toca hacer el papel de un duro pero responsable guardia civil que lucha por un mundo mejor. Su papel está muy bien descrito, y le acompañan otros actores conocidos como Karra Elejalde y Jesús Carroza, estos últimos encarnando a dos auténticos perdedores cada uno en su parcela. Karra cambia su papel de vasco gracioso y Carroza pasa de sus habituales personajes secundarios a tener un papel más importante.
Eso si, el lenguaje es tan fuerte y tan lleno de tacos como es habitual en el cine español.

Para: los que les atrapen thriller bien rodados y les impacte el peligro del narcotráfico.