No, Felipe González no fue un buen presidente del gobierno. Lo que ocurre es que hemos caído tan bajo, primero con Zapatero, que nos devolvió al guerracivilismo y al odio -aquí, sí, odio- entre españoles, luego al narcisismo de Sánchez, una egolatría que repugna al pensamiento cristiano... que hasta un ateo con sentido común como Felipe González, puede ser necesario en estos momentos. Aun diría más: puede resultar imprescindible.Un ateo, nunca puede ser un buen gobernante de España porque España no es sino una consecuencia de la fe cristiana, algo que, no me cansaré de repetirlo, no ocurre con ningún otro país, quizás con la excepción de Italia. y el ateísmo supone un atentado contra su historia. Ahora bien, el sentido común de Felipe González nunca viene mal. y, cuando estamos tocando fondo, es cuando el sentido común se conviene en mandamiento imperativo, es ese instante en que puede darse por sabido. 

Por eso, la entrevista del ex-director de ABC, Ignacio Camacho, al ex-presidente Felipe González, publicada ayer en el ABC, merece ser leída en su muy aprovechable totalidad.