Los portavoces de PSOE y Compromís volvían a pedir la dimisión de Carlos Mazón, el presidente pepero valenciano
Ocurrió el jueves 19, en el Pleno del Parlamento valenciano. Los portavoces de PSOE y Compromís volvían a pedir la dimisión de Carlos Mazón, el presidente pepero valenciano. Le llamaron presidente fugitivo, y fue entonces cuando Mazón no aguantó más y recordó que él se había quedado, aguantando el chaparrón popular, junto a los Reyes en Paiporta y que otros (por Pedro Sánchez) se dieron a la fuga.
Un político sabe que puede aparecer como un corrupto, incluso como un delincuente, pero no como un cobarde: eso es su fin. Con la cobardía es hasta difícil crear una realidad paralela que lo oculte... aunque Sánchez lo intenta.