Salvador Illa ha renombrado a Jose Luis Trapero como jefe máximo de los Mossos. Ahora el socialista sabe a lo que se enfrenta: de inmediato han surgido los sindicatos diciendo que este chico no les gusta porque habla poco con los sindicatos. Es decir, que negocia poco con sus subordinados, lo cual demuestra la visión policial que tienen algunos sindicatos de la policía autonómica catalana, órgano jerárquico donde lso superiores no negocian con sus inferiores sino que dictan órdenes. Ahora bien, a mí tampoco me gusta Trapero, aunque por otras razones. Le considero un indepe de sí mismo, que ha pasado de Josep Lluís a José Luis y ahoa vovlerá a Josep Lluis por exigencias del guión.

Veamos: su actitud frente al atentado terrorista de 2017 no fue la adecuada: la culpa no la tuvo Madrid. La culpa fue de un nacionalismo catalán que ponía todas las barreras de entrada posibles a los hispanoamericanos, porque hablan español y eran de cultura española. Preferían a los musulmanes.

Su actitud frente a Pérez de los Cobos, tampoco. Y su postura en el juicio por sedición, con aquella historia del operativo para detener a Puigdemont, menos. 

El nacionalismo catalán creó el caldo de cultivo para el fanatismo islámico. Y Trapero ni se enteró de los preparativos, o no supieron evitar el salvaje atentado de las Ramblas. Pero, para la majadera parroquia indepe quedó que la culpa del atentado fue de Madrid. Insisto, no lo he oído a cualquier barbián sino a altos responsables empresariales y polìticos en Cataluña. 

Asimismo, cuando el Gobierno de España envió al coronel de la Guardia Civil, Diego Pérez de los Cobos, como coordinador de todas las fuerzas policiales, los chicos de Trapero mantuvieron una actitud de resistencia y sabotaje.  

Luego vino el juicio por sedición, delito hoy borrado del Código por Pedro Sánchez, en el que Trapero habló de que tenía preparado un dispositivo para detener al entonces presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. Pero, miren por dónde, Puchi huyó y ahora se ha encargado de tomarle el pelo a los Mossos.