Pero hay algo que Sánchez nunca podrá borrar: su cobardía en Paiporta / Foto: Pablo Moreno
Dicen en Moncloa que Pedro Sánchez no volverá a Valencia “para darse un paseo”. Eso seguro que no.
El héroe de Paiporta, que dejó tirados a los Reyes por pura cobardía ante unos pobres vecinos indignados que no le querían allí, se ve obligado a esconder esa cobardía con ministros que acuden a Valencia, día sí y día también, y con unas terminales que escenifican un ataque contra el delicuescente presidente valenciano, el pepero Carlos Mazón, cuyo apellido, al parecer, rima con dimisión.
La cobardía del presidente, cuando abandonó a los Reyes, le perseguirá siempre. Sus ministros tratan de cubrir sus ausencias en Valencia mientras sus terminales lanzan un ataque contra Carlos Mazón
Es curioso el caso de Pedro Sánchez. No recuerdo, y los he conocido a todos, incluido Adolfo Suárez, a ningún presidente del Gobierno que caiga tan mal como este. Por su egolatría y por su sociopatía. Es un personaje que suena falso, a propios y a extraños, a quienes le repudian y a quienes le votan.
De hecho no creo que nadie vote a Sanchez con entusiasmo. Más bien creo que votan al Sanchismo, al progresismo de izquierdas, pero no a Sánchez.
Y sin embargo, es muy posible que este hombre logre mantenerse en el poder, desde el 1 de julio de 2018 hasta bien entrado, me imagino, el año 2027.
Juan Español no vota al ególatra y sociópata de Pedro Sánchez: votan al progresismo de izquierda socialista y comunista
Pero hay algo que nunca podrá borrar: su cobardía en Paiporta. No sé si perderá las elecciones por ello, pues todos olvidamos hasta demasiado rápido, pero sí sé que me sigue llamando poderosamente la atención un personaje al que nadie soporta y no por ello deja de mantenerse en el poder y lo que es peor, lo ejerce sin clemencia alguna.
Pedro Sánchez ejerce el poder según la vieja definición clásica: ¿qué es poder? La capacidad de infligir daño.
Sí, es un personaje único.