Consejo de Ministros del viernes 4 de marzo. Salen a escena Isabel Rodríguez, la titular de Justicia Pilar Llop -jueza contra la violencia machista- y Fernando Grande-Marlaska, un hombre que sigue detentando buena memoria. 

Rodríguez podría portavocear un consejo de ministros diario que seguiría sin decir esta boca es mía. La portavoz porta muy poquita voz.

Por su parte, Pilar Llop, jueza de violencia de género y ministra de Justicia, pone cara de enfadada, más enfadada cuando más miente. Y así, su expresión más siniestra es para avalar que la Fiscalía es independiente. 

Viene a presentar un anteproyecto de promoción de la delación. En lenguaje oficial: "Anteproyecto de ley reguladora de la protección de las personas que informen sobre infracciones normativas y de lucha contra la corrupción, por la que se transpone la Directiva (UE) 2019/1937 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 23 de octubre de 2019, relativa a la protección de las personas que informen sobre infracciones del Derecho de la Unión, a los efectos previstos en el artículo 26.4 de la Ley 50/1997, de 27 de noviembre, del Gobierno".

Traducido: proteger al delator hasta convertir a España en un país de chivatos. Ya los tenemos en Hacienda pero ahora los queremos, tanto en todos los espacios públicos como, mucho me temo, en los privados, vía regulación.

Si hay algo repugnante en la sociedad de la información es el anonimato, la actitud más cobarde de todas, muy habitual en Internet. Pues bien, el Gobierno Sánchez pretende respaldar y proteger al delator.

Grande-Marlaska se pierde en su mundo onírico de los derechos. Habla después de que miles de negros (subsaharianos no, son hombres, muy respetables, de raza negra) saltaran la valla de Melilla y entraran ilegalmente ne España.

Naturalmente estos hombres no hubieran entrado si no fuera porque los marroquies les lanzan contra la frontera. Son balas humanas contra España.

Pues bien, Marlaska, uno de nuestros peores ciudadanos, asegurando que Marruecos coopera y coordina con España de forma "excelente".

Pues muy bien.