La actualidad política en España durante esta mañana giraba en torno al posible acuerdo entre PP y Gobierno Sánchez para hacer frente, con un plan de ayudas, a la situación derivada de la imposición de aranceles por parte de la Administración Trump.

El pasado martes 8, el diputado de Junts en el Congreso, Josep María Cruset, aseguraba que habían acordado con el Ejecutivo que las las empresas catalanas fuesen beneficiadas con el 25% de los 14.100 millones de euros aprobados en ayudas, es decir, unos 3.000 millones de euros. Cruset decía que, así, Cataluña, consigue que reciba "lo que es suyo”. En la mañana de este miércoles 9, la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, corroboraba esa información: a Cataluña llegará "lo que le corresponde". Unas palabras que redundan en el habitual egoísmo antisolidario de los 'indepes' catalanes. 

Sin embargo, también esta mañana, en la sesión de control al Ejecutivo, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha negado que exista un acuerdo arancelario que "beneficie" a Junts o a Cataluña.

Asimismo, el portavoz parlamentario socialista, Patxi López, ha señalado: "Las ayudas llegarán a las empresas, a los sectores y a los trabajadores que se vean afectados y punto". Aunque López ha aprovechado para cargar contra el PP exigiéndole que que no utilice esto como "una excusa para buscar un conflicto donde no lo hay".

Se refería López a la amenaza del PP de romper las negociaciones con el Gobierno, tras salir a la luz el supuesto pacto con Junts. También en la sesión de control, la portavoz del PP, Cuca Gamarra, le espetaba al Gobierno: "Están aprovechando la crisis de los aranceles para beneficiar a Junts". "Si lo vuelven a hacer no contarán con nosotros". "Cuando ustedes tienen que elegir entre España y sus socios, siempre eligen a los segundos". 

Sin embargo, según ha trascendido, el diputado del PP Juan Bravo sigue negociando con el Ejecutivo, concretamente con el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, quien habría asegurado a los populares que las ayudas se repartirán a demanda, es decir, por necesidad, y no por criterios territoriales...

También en la sesión de control de esta mañana, Cuerpo apuntaba: "Lo que vamos a hacer es seguir hablando, seguir teniendo la mano para construir una respuesta conjunta", entre partidos políticos, comunidades autónomas, agentes sociales y los propios sectores.