Un detalle de la personalidad del presidente es esta imagen que él mismo publicó en su twitter
En el verano de 2021, Pedro Sánchez se desplazó a Estados Unidos. Fueron tres días -21, 22 y 23 de julio- de escaso provecho en resultados prácticos y nulo eco mediático, aunque de cuantioso gasto para el erario público: 235.810,97 euros de los que la mayoría, 230.809,22, se corresponde solo a «alojamientos»; 4.594,02 euros para «manutención», y 407,73 en concepto de «otros gastos», según datos facilitados por la Secretaría General de la Presidencia del Gobierno al Consejo de Transparencia, a los que ha tenido acceso LA RAZÓN.
El séquito detallado incluye a 31 personas, más el presidente.
Son cifras obtenidas gracias a la petición de un ciudadano particular, denegada en un primer momento por Presidencia, pero recurrida de nuevo hasta que, el pasado 4 de abril, el Consejo de Transparencia y Buen Gobierno instaba al departamento gubernamental a aportar la información solicitada por Guillermo Rocafort, abogado y profesor de universidad.
El abogado Guillermo Rocafort, «después de más de un año de lucha», describe como «viaje de placer a costa de los españoles» el periplo del presidente. Rocafort acudirá de nuevo a Transparencia por cuanto el Gobierno «no ha informado de los empresarios privados que acompañaron» a Pedro Sánchez, «dato que estarían obligados a desvelar», ya que «la petición de información incluía a todos sus acompañantes, no solo a sus altos cargos elegidos a dedo», recoge La Razón.
Entiende el abogado reclamante que «también estaría Presidencia del Gobierno obligada a informar sobre el coste pagado por el alquiler de coches para los desplazamientos, porque no hay ninguna diferencia a este respecto entre alojamiento y modo de transporte. Solo se pidió conocer el coste de los alquileres del convoy presidencial donde se desplazó durante tres días [Sánchez] por un país tan extenso como Estados Unidos y el Consejo de la Transparencia ha dicho que hay que informar del coste de alquiler de vehículos».
Satisfecho solo en parte, se pregunta que «si no se ha visitado al presidente Biden, ni a ningún responsable político de nivel, y tampoco se han cerrado acuerdos con empresas privadas de este país, ¿cuál habrá sido el motivo de un viaje tan multitudinario como costoso y cuáles han sido los resultados?», explica a La Razón.
Y todo eso, recordemos, mientras Pedro Sánchez nos abrasa a impuestos y se niega a recortar gastos. Escandaloso...