En relación al incidente diplomático entre el Gobierno español y el Gobierno argentino por las declaraciones ayer del presidente argentino Javier Milei tildando de corrupta a Begoña Gómez, la esposa de Pedro Sánchez, las reacciones se vienen sucediendo en las últimas horas.

Por una parte, el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, ha citado esta mañana al embajador de Argentina en España, Roberto Bosch para exigirle que Milei exprese unas "disculpas públicas". Y lo hace después de llamar "a consultas" 'sine die' a la embajadora española en Argentina (es costumbre diplomática hacerlo al revés, pero es que Albares es muy moderno). 

Otra reacción ha sido la del propio portavoz del Gobierno argentino, Manuel Adorni, que le canta las cuarenta al Ejecutivo de Pedro Sánchez recordando las varias veces que ministros españoles y el propio Sánchez han insultado a Milei y a su Ejecutivo. No se lo pierdan: 

También el ministro del Interior argentino, Guillermo Francos, descartaba que Milei pida disculpas, porque "no siente que tenga que hacer ninguna disculpa". "Pueden esperar tranquilos que no va a pasar". "Fueron agresiones del Gobierno del presidente Sánchez" y que Milei en su discurso "no hizo ninguna mención directa". "No sé por qué tanta ofensa". "Han levantado el tema innecesariamente y ojalá lo de por superado", indicando que "el presidente Milei no va a hacer comentarios" sobre este asunto.

Desde Vox, su portavoz Pepa Millán afirmaba que "ni Sánchez ni su mujer son la democracia ni son España":

Al PP le parece que la actuación del Gobierno español ante las palabras de Milei es una "sobreactuación para movilizar el voto de izquierdas en las elecciones europeas". Aunque esta mañana, el pepero Estaban González Pons atacaba a Milei: "El discurso de Milei es una intromisión en política nacional y un espectáculo chocante. No puede o no debe en su primer viaje a España venir sin saludar al Rey, al Gobierno...". Aunque luego añadía que "la mujer de Pedro Sánchez no es un asunto de Estado". 

De su lado, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, rechazaba "profundamente" las declaraciones de Milei: "Rechazamos profundamente (...) unas declaraciones fuera de tono (...) no es el sitio ni el lugar ni lo que se pide a dos países amigos, hermanos". 

Por su parte, el dictador venezolano Nicolás Maduro se ha posicionado a favor de Pedro Sánchez, con estas palabras: "Milei es una vergüenza, eso es una cosa que sólo lo podría hacer Milei o Hitler. Insultar al presidente de ese país, insultar a la esposa, sencillamente es una vergüenza, es una desfachatez que no tiene límites. Es un acto de locura". 

Asimismo, otro dirigente ultraizquierdista, el actual presidente colombiano Gustavo Petro, ha mandado su "solidaridad" a Sánchez:

Por otra parte, desde Argentina han hecho viral el siguiente lema, con bastante mala idea: