No habían pasado ni 24 horas desde que el Tribunal Supremo inadmitiera la querella de la Asociación Liberum y la Fundación Foro Libertad y Alternativa, contra María Jesús Montero, por lo que dijo el pasado 12 de marzo sobre el novio de Ayuso, y este miércoles ha vuelto a la carga utilizando la misma estrategia que, y esto es lo más grave, podría ser constitutiva de delito.

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Esto es lo que ha dicho la vicepresidente primera del Gobierno y ministra de Hacienda, este miércoles, tras ser preguntada por los periodistas, en los pasillos del Congreso: “En los próximos días conoceremos más informaciones que nos escandalizarán”, afirmó refiriéndose al novio de Ayuso.

Parece una tontería pero no lo es, porque la ministra de Hacienda, en teoría, no tiene acceso a los datos fiscales de los contribuyentes y, mucho menos, puede desvelar información privada de un ciudadano. Por eso llama poderosamente la atención el anuncio que ha hecho hoy -“más informaciones que nos escandalizarán”-, y que podría acabar con ella en los tribunales como el Fiscal General del Estado, actualmente imputado por, supuestamente, filtrar los datos del novio de Ayuso.

Está claro que Marisu se ha venido arriba tras la decisión del Supremo -martes 22- de inadmitir a trámite las querellas presentadas contra ella por lo que desveló, sobre el novio de Ayuso, en el mes de marzo, como hemos señalado antes. Según el Supremo, la número dos del Gobierno no reveló “ningún dato personal y reservado” del susodicho.

Ahora bien, lo de este miércoles es distinto porque mientras en aquella ocasión la clave estaba en si había hablado antes o después de la publicación de la información sobre el novio de Ayuso, en esta ocasión, la ministra adelanta o anuncia la revelación de “informaciones que nos escandalizarán”.

Marisu se puede haber metido en un gran lío.