El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha marchado de gira asiática para visitar Vietnam y China

Ahora mismo se encuentra en Vietnam, desde donde ha posado como gran estadista del mundo mundial, asegurando que que "las guerras comerciales no benefician a nadie".

Se refería, claro, al tema del momento, los aranceles impuestos por la Administración Trump a medio mundo. 

En opinión de Sánchez, "España apuesta por un orden internacional basado en reglas, por el libre comercio y por la apertura económica, y considera que las guerras comerciales no benefician a nadie, sino que perjudican a todos".

Como primer acto de la agenda, el presidente ha mantenido una reunión en Hanoi con el primer ministro de Vietnam, Pham Minh Chinh, al que le ha dicho: "España valora enormemente los avances y el desarrollo alcanzados por Vietnam en los últimos años, y desea respaldar y acompañar ese progreso".

Además, el presidente español ha subrayado también el "compromiso decidido" de ambos países con el multilateralismo "para hacer frente a los grandes retos de nuestro tiempo, y somos, además, firmes defensores del libre comercio para lograr el desarrollo y la prosperidad de nuestros pueblos. A nadie le interesa una guerra comercial; en una guerra comercial todos perdemos, y sobre todo quien pierde son los trabajadores y la clase media de la sociedad".

"España sigue con gran interés la modernización de Vietnam, al que queremos acompañar en su crecimiento", ha concluido Pedro Sánchez, en la primera visita de un presidente español al dicho país asiático.