Por deber moral, toma ¡ya! El Partido Popular, poco antes de que acabe el plazo, decido presentar, por fin, su recurso de anticonstitucionalidad contra la ley de amnistía. Pues resultará muy moral pero no muy eficaz, incluso algo sospechoso. 

En primer lugar, porque todos sabemos que el presidente de turno del constitucional Cándido Conde-Pumpido consideraba que la norma del gobierno Sánchez resulta de lo más constitucional, legalísima y pertinente.

En segundo lugar, porque los recursos del PP son poco incisivos. Quiero decir que cuando dejan de interesar, el propio PP los paraliza. Recuerden el recurso contra la ley del aborto de Rodríguez Zapatero. Se tiró más de 12 años en el Constitucional. Incluso, con Rajoy en La Moncloa, el propio gobierno paralizó la decisión del Tribunal Constitucional, en el que por aquel entonces tenía mayoría, como ahora la tiene, y mayoría más descarada, Pedro Sánchez. No le convenía al PP quedar muy provida, que no hace moderno, y, seguramente, cuando llegue al poder, no querrá remover el avispero de la ley de Amnistía. Que sí que es claramente constitucional pero no resultará pertinente el revocarla.

La derecha española es así: siempre conservan lo que dejan los progresistas, no vayan a llamarles antiguos.