Este miércoles en el Congreso se votaron tres decretos leyes. Los dos primeros fueron rechazados y sólo se aprobó el referente a la jubilación activa. No confundir con la subida de las pensiones, que no se aprobó al estar incluida en el 'decreto ómnibus'.

Hablamos, concratemente, del 'Real Decreto-ley 9/2024, de 23 de diciembre, por el que se adoptan medidas urgentes en materia económica, tributaria, de transporte, y de Seguridad Social, y se prorrogan determinadas medidas para hacer frente a situaciones de vulnerabilidad social', denominado 'decreto ómnibus', y que incluye subida de las pensiones y del SMI así como la subvención al abono transporte y a los afectados por la DANA, y también la cesión de un palacete en París al PNV (la sede del Instituto Cervantes que iba a ser entregada al PNV en pago a sus 'servicios' al Gobierno). 

Tanto PP como Vox y Junts votaron en contra, por lo que el decreto ley no se convalidó.

El segundo es el 'Real Decreto-ley 10/2024, de 23 de diciembre, para el establecimiento de un gravamen temporal energético durante el año 2025', es decir, el 'impuestazo energético'. 

Para este segundo decreto, Junts ya anunció su voto en contra con estas palabras de su portavoz en el Congreso, Miriam Nogueras: "Lo que hoy tumbamos es su mentira, su chantaje y su piratería". Este  segundo decreto, que buscaba prorrogar el gravamen a las empresas energéticas durante el año 2025, también fue rechazado por el PNV. El PP también votó en contra, por lo que tampoco salió adelante.

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El único que se aprobó fue el 'Real Decreto-ley 11/2024, de 23 de diciembre, para la mejora de la compatibilidad de la pensión de jubilación con el trabajo’, es el referido a la reforma de las pensiones mediante la jubilación activa, es decir, la mejora de la compatibilidad de la pensión de jubilación con el trabajo. Para este decreto, el PP votó a favor, tal y como había anunciado. Se tramitará por la vía de urgencia.

No obstante, el diputado y vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo, ha espetado al Gobierno: "Si ustedes tienen una mayoría progresista, sométase a una cuestión de confianza o apruebe los Presupuestos. Y si no la tienen, convoquen elecciones". Y para desmontar el argumento de la izquierda, que acusa a los populares de no querer subir las pensiones, Bravo anunció que "hemos presentado un proyecto de ley para actualizar las pensiones, para el Ingreso Mínimo Vital (IMV), para recuperar lo que realmente importa".

Lo que está claro es que esa supuesta mayoría progresista hoy ha brillado por su ausencia en el Congreso. Y el ejecutivo sanchista se ha llevado un buen disgusto. 

Por cierto,  el rechazo de los de Puigdemont al llamado decreto ómnibus del Gobierno tiene como consecuencia directa la derogación de la suspensión de los desahucios que lleva vigente desde 2020 y que, en estos cinco años, ha arruinado literalmente la vida a miles de propietarios de toda España.

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