Por una vez, y sin que sirva de precedente, debemos reconocer que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha estado acertado. Ha sido en el Congreso de los Diputados, donde se esperaba que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez explicara su plan de rearme y el aumento del gasto en defensa.

"No ha venido a ofrecer un plan de Defensa porque no lo tiene. Tampoco ha venido a informar de la hoja de ruta europea, como mucho a dulcificarla, cuando no a contradecirla", aseguraba el gallego, y no se equivocaba. Un histérico Sánchez hablaba desde la tribuna olvidando que es presidente del Gobierno y que se encontraba en el Congreso, usando un lenguaje más propio de taberna que del templo de la palabra. Chulerías de patio de colegio dedicadas a los diputados 'populares' Tellado y Hernando, caras de desprecio en cada intervención y salidas por la tangente al ver que estaba acorralado.

No debemos perder de vista que Sánchez se mueve en una delicada cuerda entre lo que pacta con Bruselas, por ejemplo el aumento del gasto en defensa, y lo que promete a sus socios. Y Feijóo se lo ha recordado, "conviene explicar por qué Europa tiene que aumentar el gasto militar. Sin eufemismos, señoría, tratando a nuestra gente como adultos que son: Europa tiene que incrementar el gasto militar porque está amenazada".

El líder del PP ha aclarado que el rearme "no es una apuesta belicista como irresponsablemente repiten sus socios mientras usted calla", es algo necesario, porque se trata "de defender nuestros valores, nuestro modo de vida, nuestro Estado de derecho, nuestras constituciones y nuestras democracias ante enemigos que tienen un rostro distinto que hace décadas pero que amenazan de forma semejante", parece que Feijóo incluso escucha a Ayuso. 

Con sus palabras evidenciaba, aún más a Sánchez, el cual se sumerge en un Gobierno en el que la mitad de sus miembros quieren salir de la OTAN, mientras él negocia comprometerse con el organismo, recordándole que es contradictorio intentar llevar la voz cantante en materia de seguridad cuando ha cedido las fronteras a los independentistas: "¿Cómo va a dar lecciones de seguridad quien cede las fronteras a los que no creen en la nación? ¿Cómo vamos a procurar una respuesta conjunta de Europa si aquí el Gobierno responde cosas distintas en función del ministro que hable? ¿Cómo vamos a comprometernos ante la OTAN si la mitad del Gobierno quiere salirse de la OTAN?". 

Feijóo le pedía una cosa a Sánchez: que aclare si va a haber presupuesto, porque son necesarios para aprobar ese aumento del gasto, al tiempo, evidenciaba una más de las incontables contradicciones del galgo de Paiporta: "Les dice a los enfermos de la ELA que sin presupuestos no es posible conseguir los 200 millones y, por otro lado, pretende convencernos de que sí va a ser capaz de dirigir inversiones multimillonarias para defensa. Definitivamente, usted a los españoles nos toma como idiotas". 

Al verse acorralado y saber que es muy difícil que consiga aprobar los presupuestos, ha defendido el funcionamiento de los Presupuestos de 2023 prorrogados este año y ha asegurado que si no "da tiempo" a aprobar los de 2025 -que ya van con medio año de retraso-, el Gobierno se pondrá a negociar directamente los del año que viene. "Vamos a romper una lanza por estos Presupuestos, que son mejores que los de 2018, que eran un desastre, y han apuntalado el crecimiento económico". 

El gallego le ha exigido que explique de dónde va a salir el dinero, que aclare si va a endeudar más a los españoles porque "En España, lo único que sabemos del gasto en Defensa, mejor dicho, del gasto en rearme, es que usted le quiere cambiar el nombre. Es usted un gran estadista".

Sánchez, habitual en su cursilería, le espetaba a la bancada popular que "estén a la altura del momento histórico", y es que en estos años, todo lo que hace el Gobierno es histórico. 

Un acorralado e histérico Don Pedro se veía obligado a cargar contra todos a falta de algo que contar, asegurando que "Feijóo está a las ódenes de Abascal", no como él, que vuela libre, ¿por siete votos tienes el culo roto? Eso sólo es un bulo de la ultraderecha. También ha afirmado que es el PP quien "blanquea a Vox": insistimos, no como él que, como le ha recordado Feijóo abrió "las puertas de par en par a los restos políticos de ETA. Ahora resulta que el progresismo es recibir a Bildu en la Moncloa para hablar de comprar armas". 

Siguiendo en un intento de no caer en su delicado equilibrio entre Bruselas y sus socios, primero aseguraba que "queremos invertir mas para ser mas autónomos", para 30 segundos después alertar de que "necesitamos una política de defensa común", que "hay que despertar porque la única certeza es Europa" ¿En qué quedamos?