
Decíamos esta misma mañana en Hispanidad que se confirman las más que sospechas: la Basílica del Valle de los Caídos será profanada por el "Memorial" sanchista, así puede verse en la convocatoria oficial del concurso, nada menos que internacional.
Sánchez ha resultado ser un profanador de tomo y lomo y, como demostró en la pandemia, un asiduo a los comités de expertos, científicos, evidentemente. Por eso en los pliegos del contrato para el nuevo proyecto de Cuelgamuros se convoca a un jurado.
Dicho grupo de expertos estará conformado por cuatro personas que decidirán el nuevo proyecto entre los presentados. Y ojo, que se embolsarán casi 5.000 euros cada uno. La participación se divide en dos sesiones, por la primera se remunerará con 2.500 euros y la segunda con 2.250 euros.
Sánchez, muy influenciado por Yoli, no puede permitir que estos expertos no gocen de las mejores condiciones laborales por eso, aunque estman "un máximo de dos sesiones de deliberación para la primera vuelta del concurso y una sesión para la segunda vuelta", en el caso de que, por el número de propuestas o su complejidad, se determine la necesidad de celebrar alguna sesión adicional de deliberación, "se remunerará la participación de cada sesión extra con 250 euros".
Parece oportuno recordar que, mientras Sánchez planea gastar 30 millones euros de dinero público en profanar el Valle de los Caídos, por ejemplo, la Ley ELA sigue sin dotación económica. Pero Franco es mucho más importante, dónde va a parar.