Dice La Razón de mi admirado Paco Marhuenda que "Abascal impone el modelo Le Pen y consuma el cisma con el PP". 

Pues a mí me parece que Santiago Abascal sigue, no sé si por las mismas razones, el camino de Giorgia Meloni, y no de Marie Le Pen, porque el partido italiano no tiene mucho más que ver con el español que el francés.

Agrupación Nacional Francesa es la derecha pagana, la "nouvelle droite" aquel invento de Alain de Benoist, de raíz nacionalista y con sustrato ateo.  

Por el contrario, Giorgia Meloni, aunque nacida de una rama del fascismo italiano, asimismo liderado por el socialista ateo Benito Mussolini, decidió que el progresismo relativista sólo se puede combatir, no desde el nacionalismo, sino desde la antropología cristiana. Marine Le Pen nunca se ha planteado tal cosa.

En definitiva, Abascal entronca mucho mejor con la cristiana Meloni que con la agnóstica Le Pen. Sí, y sé que La Razón se refiere al caso francés, para señalar que Le Pen nunca se ha planteado colaborar con la derecha francesa, pero yo diría que hay que señalar que Vox ha roto con el PP. 

¿A quién hará más daño la ruptura, a Vox o al PP? Pues hombre, yo diría que al PP, unos chicos progres de derechas convencidos de que el voto en valores, es decir, el voto católico, no existe. Sí que existe y ese voto en parte se ha refugiado en Vox. Sí reconozco que no son muchos... yo diría que 1 millón de españoles... justo el doble de los españoles que inclinan la balanza hacia  el PSOE o hacia el PP, los votos que hacen ganar o perder las elecciones.  

Por eso, yo creo que sí, que el PP, que ha caído en la trampa socialista del 'espantajo ultra' en lugar de recuperar, vía Vox o de forma directa, los valores cristianos y hasta el mero sentido común... Feijóo puede ser el más perjudicado por la ruptura.

Ahora bien, si para Abascal la ruptura no va a consistir en rebajar el alma azul nacionalistas, que impone Kiko Méndez Monasterio, así como determinar un programa económico del que lleva huyendo cuatro años (¿alguien sabe cuál es el modelo económico del Vox?) y jubilando tradicionalistas y economistas liberales, partidarios de la meritocracia... bueno, entonces que me temo que el que le quitará votos a Vox, no será el PP sino Alvise, un ciudadano cabreado, honradamente cabreado, pero que no aporta una alternativa. 

En suma, Abascal debe aprovechar la ruptura con el PP en cinco autonomías para recristianizar Vox: es así de sencillo. Si lo hace, le irá bien, de otra forma...

En definitiva, lo que está en juego, tras la ruptura entre Vox y PP, es el voto católico... y el voto del sentido común.

Y sí: la ruptura puede favorecer más a Vox que a Feijóo, siempre que Abascal decida rebajar su alma nacionalista y recristianizar el partido. El líder de Vox debe elegir entre Meloni y Le Pen, pero tanto por ideario como por método.

A cada uno lo suyo: Vox ha dado una lección de honradez política: ha preferido sus convicciones -aunque a veces no tengo claro cuáles son- a sus cargos: enhorabuena.