La manifestación de este fin de semana en Madrid por la sanidad pública es una pieza más de la actual huelga política que la izquierda ha lanzado, no con el objetivo de mejorar la sanidad, sino con el objetivo de hundir a Isabel Díaz Ayuso. Comenzaron con una huelga que se terminó en cuestión de días y emprendieron una nueva, seguida de manifestaciones. Huelga que, todo dicho sea de paso, hasta el Colegio Oficial de Médicos de Madrid exigió despolitizar y desconvocar. Todo esto empezó a principios de noviembre, o dicho en otras palabras, la batalla electoral de mayo 2023 dio el pistoletazo de salida antes de acabar 2022. 

De esta huelga política de la izquierda todos están sacando tajada, tanto a nivel regional como nacional. Tenemos a la contrincante de Ayuso a la comunidad de Madrid, Mónica García, por si no lo saben, Mónica tiene grandes ideas, es médico y madre, por tanto, habla desde el conocimiento, aunque no ejerza como doctora sino como política. 

Mónica hace referencia a una nueva reunión entre la Comunidad y los sanitarios que ha terminado en fracaso. Recuerden que el Gobierno de Ayuso se ha sentado a negociar en numerosas ocasiones, pero un audio de una sindicalista hizo que la Consejería de Sanidad diera las negociaciones por rotas. En el audio la sindicalista comentaba la hoja de ruta, demostrando, una vez más, la politización de la huelga: "No daremos tregua hasta finales de abril con una huelga indefinida de un día a la semana". Es decir, hasta días antes de las elecciones autonómicas de mayo de 2023, cuando Ayuso deberá someterse de nuevo a las urnas. 

Seguimos con el candidato de Podemos a la Alcaldía de Madrid, Roberto Sotomayor, como decimos, da igual que Sotomayor se presente para ser Alcalde, él carga contra Ayuso, que es la culpable de todo, y la llega a acusar de terrorista sanitaria: "Desde el Ayuntamiento vamos descongestionar las listas de espera de la sanidad pública a la que nos ha abocado la señora Ayuso, que no es ni más ni menos que una terrorista sanitaria. Lo vuelvo a repetir porque lo que está haciendo es eso. Y no sólo lo digo yo, lo dijeron miles y miles de ciudadanos que salieron a defender la sanidad pública".

Pero es que seguimos escalando la huelga política y llegamos a Pedro Sánchez, que no moviliza a los sanitarios contra Núñez Feijóo, sino contra Ayuso. El sanchismo está nervioso, las encuestas no son favorables y en ese momento de histeria llega a decir que el modelo del PP es el de "que se cure quien pueda, con sus privatizaciones y con sus recortes a la sanidad pública". 

sanidad

Ayuso ha insistido y ha vuelto a tildar de "política" la manifestación del domingo: "lo único que se vio fue la frustración de la izquierda", asegurando que esas protentas solo "ensuncian" la imagen de la sanidad madrileña que es "la segunda mejor de Europa".

"Llevan desde hace meses alimentando una huelga política que al final siguen 30 personas al día". "Esta manifestación política y estas huelgas políticas no tienen nada que ver con la verdad", ha asegurado.

Razón no le falta a la Presidenta, pero ojo, que no pasaría nada si se saliera del tablero de juego una vez más y propusiera lo que ya ha hecho con las residencias: cheque sanitario, es el más igualitario y supera la pugna entre sanidad pública y sanidad privada. Lo que importa es la salud del paciente, no quién paga al médico que le cura. Con el cheque sanitario, quien decide es la familia.