Canadá está gobernada por el ultraprogre Justin Trudeau, es decir, un personaje al servicio del Nuevo Orden Mundial y por tanto empeñado en instaurar políticas contrarias a la ley natural, como la ideología de género, el aborto, la eutanasia...

Hispanidad ha ido recogiendo noticias al respecto, como por ejemplo, que en Canadá la eutanasia ya es la quinta causa de muerte, debido en parte a la presión que se ejerce sobre determinado enfermos -por ejemplo, con discapacidad o con cáncer grave- para que pidan la eutanasia... 

También recogió Hispanidad la presión que ejerce el Gobierno de Trudeau sobre los hospicios para obligarles a incluir la eutanasia entre sus servicios

Ahora, en su obsesión por la muerte, el Gobierno canadiense ha establecido que los centros de ayuda a embarazadas deben aclarar públicamente si ofrecen servicios de aborto y, si no lo aclaran, podrían perder su 'estatus benéfico', una figura legal que les permite estar exentos de pagar algunos impuestos y también les permiten a sus donantes deducirse algunos impuestos. 

Se da la circunstancia, además, de que los centros de ayuda a embarazadas ofrecen ayuda a madres en especiales dificultades, a las que proporcionan pañales, leche en polvo, ropa de bebé e incluso, en casos en los que se elige la adopción, la asistencia en los trámites burocráticos.

Jared White, director ejecutivo de la organización benéfica Advokate, considera que el gobierno está enviando «un disparo de advertencia», y le preocupa que esta medida sea un precedente para imponer más regulaciones en el futuro.

Por su parte, Kimberly Bromley, directora de Pregnancy Concerns, un centro de ayuda en Coquitlam, señaló: «Cuando la gente nos llama, dejamos claro que no somos un centro médico, sino una organización de apoyo»

Así que ambos creen que se trata de un primer paso que podría desembocar en un mayor control sobre sus actividades…