Decíamos en Hispanidad que las encuestas en Reino Unido eran tan claras que hasta el primer ministro del Reino Unido, Rishi Sunak (conservador) daba por hecho la victoria de su contrincante, Keir Starmer, líder del Partido Laborista. Tal es así, que Sunak sacó la artillería pesada en su último mítin: Boris Johnson.

Relacionado

La aparición en último momento del Boris no ha sido suficiente y, como era de esperar, los sondeos han acertado y Starmer es el nuevo primer ministro británico, la victoria ha sido aplastante, por mayoría absoluta. 

“Esta mañana podremos ver que el pueblo británico ha votado para pasar página tras 14 años, pero no pretendamos que había algo inevitable en ello. No hay nada predestinado en política. Las victorias electorales no caen del cielo, se ganan con esfuerzo y se lucha por ellas. Esta solo podía ganarla un Partido Laborista cambiado”, ha asegurado.

Sunak por su parte ha reconocido la victoria de los Laboristas: “El Partido Laborista ha ganado estas elecciones generales y he llamado a Keir Starmer para felicitarle. Le felicito por su victoria. Hoy el poder cambiará de manos de manera pacífica y ordenada, con buena voluntad de todas partes. Esto es algo que debería darnos a todos confianza en la estabilidad y el futuro de nuestro país. El pueblo británico ha emitido esta noche un veredicto aleccionador”.

Ha reconocido que “hay mucho que aprender y reflexionar” y ha asumido “la responsabilidad del fracaso”. Con 633 de 650 escaños escrutados, el Partido Laborista habría conseguido 408, y el 34% del voto, y el Partido Conservador se queda con tan solo 114 escaños, y el 23,7% del voto. La participación ha sido baja, sin llegar al 60%, y ha caído desde las últimas elecciones un 7,6%. 

Llama la atención el ascenso de el avance de Nigel Farage que, por ahora, se mantiene como tercera fuerza política pero que se ha quedado a muy poco de sorpassar a los Conservadores.

Recuerden que el sistema inglés beneficia a los dos granes partidos: Reino Unido está dividido en 650 circunscripciones, tantas como escaños conforman la Cámara de los Comunes, en cada cincunscripción se elige un único candidato, por lo que los votos de los derrotados no suman de ninguna manera. Por tanto, el porcentaje de voto cobra mucha importancia. Reforma, heredero del Partido del Brexit, que ha confiado en su fundador Farage para aprovechar la pérdida de popularidad de Sunak, ha alcanzado el 14,3% del voto, por debajo de algunas encuestas, pero teniendo en cuenta que los Conservadores se han quedado en el 23,7%, sin duda, podemos afirmar que la figura de Farage cobrará gran importancia estos años.

Así, Sir Keir Rodney Starmer,  2 de septiembre de 1962, se convierte en el siguiente habitante de Downing Street, político, progresista y abogado especializado en derechos humanos. Está casado desde el 2007 con Victoria Alexander, también abogada que ahora trabaja en salud ocupacional en el Servicio de Salud. Tienen dos hijos que están siendo educados en la religión judía de la nueva Primera Dama, y es que Starmer se ha declarado en más de una ocasión como ateo. 

Muy aficionado al fútbol, muchos los definen como una figura clásica del establishment, aunque también ha asegurado ser vegetariano y es que apuesta por el vegeterianismo como lo mejor para el medio ambiente. Lo que queda claro es que Starmer es laborista desde que nació, al heredar su nombre de pila de Keir Hadie, fundador y primer líder del Partido Laborista a principios del siglo XX. Por lo demás, tendremos que esperar cómo avanza su presidencia para saber más sobre el discreto y poco posicionado Primer Ministro.