Si algo ha demostrado ser nuestro presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es valiente. Con esa gallardía que ya demostró en Valencia, el 'héroe de Paiporta' se ha indignado mucho muchísimo con el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, porque éste ha conseguido que el Parlamento prohíba el Orgullo Gay. ¿Y qué ha hecho nuestro amado líder? Chivarse a Ursula... y poner un mensaje en sus redes sociales: "Europa no debe permitirlo. Europe must not allow it"
Europa no debe permitirlo.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) March 18, 2025
Europe must not allow it. https://t.co/ZdcQ4giYbr
Aún se escuchan las carcajadas desde Budapest.
Volviendo al caso, el Parlamento húngaro ha aprobado por 136 votos a favor la propuesta que hizo el partido de Orbán de no permitir las celebraciones del Día del Orgullo. Todo amparado en una ley que se sometió a referéndum entre los húngaros por la cual se establece la prohibición de todo contenido que "promueva o muestre desviaciones de género asignado al nacer, reasignación de género y homosexualidad".
Ley que como recordarán no gustó en Bruselas, pero que Orbán, como hechos dicho, sometió a votación entre los ciudadanos, y fíjense por donde, los húngaros aprobaron con una aplastante mayoría. Eso enfureció aún más a esta Europa progre que no ha dejado de castigar a Hungría desde ese momento, congelando fondos y con más de una denuncia en tribunales europeos.
Ahora, el objetivo de esta nueva prohibición es el mismo: velar por el "el derecho de los niños a un desarrollo físico, mental y moral adecuado". Una idea en la que ha incidido Orbán poco después en X, donde ha celebrado que se haya impuesto la "protección de la infancia".
"Hoy votamos a favor de prohibir las reuniones que violan las leyes de protección infantil. En Hungría, el derecho del niño a un desarrollo físico, mental, intelectual y moral saludable es primordial. No permitiremos que la ideología progresista ponga en peligro a nuestros niños".
Child protection: ✅
— Orbán Viktor (@PM_ViktorOrban) March 18, 2025
Pride march: ❌
Today, we voted to ban gatherings that violate child protection laws. In Hungary, a child’s right to healthy physical, mental, intellectual, and moral development comes first. We won’t let woke ideology endanger our kids.
Algo inaceptable para Ursula, Sánchez y demás colegas europeos, ellos no pueden permitir que un país sea soberano, máxime cuando no es progresista.