No cabía un alfiler en el lateral del Palacio de Oriente, impresionante marco de los aledaños del Palacio de Oriente con la recién inaugurada Galería de las Colecciones reales. Sánchez no repara en gastos. 

La mejor campaña electoral que el PSOE podría haber planteado y ni tan siquiera lo paga el PSOE: lo pagamos todos. 

Nada menos que los 27 comisarios de la Unión Europea (el número ya la hace ingobernable) capitaneados por la alemana Ursula Von der Leyen, una progre de derechas. Junto al líder, todo el gobierno socio-podemita en funciones. En definitiva, una utilización de Europa en plena precampaña electoral española. Por todo lo alto.

La Europa de Sánchez: pacto migratorio, que confunde refugiados con inmigrantes, y Pacto Verde, es decir, la castración de Europa. De volver a la disciplina fiscal, nada: cuanto más tarde mejor

Balance de este 3 de julio de 2023: Sánchez no consigue que la progre Von der Leyen le apoye explícitamente... pero casi. Así, doña Ursula aseguró confiar "en el espíritu europeo de España", un apoyo tácito a Sánchez, a costa de propalar el espantajo populista: Vox es un peligro para... el espíritu europeo de España, dócil seguidor de la eurocracia bruselina. Para que quede claro, doña Ursula anima a los españoles a que no voten ni a Feijóo ni a Abascal.  

Y a todo esto, ¿cuál va a ser la Europa de Sánchez? Pues muy poquita cosa y lo poco que hay no es bueno, es malísimo: pacto migratorio, que confunde refugiados con inmigrantes y que cosifica a las personas. y Pacto Verde, es decir, la castración de Europa: menos producción agrícola, ganadera y forestal. Más Política Agraria Común (PAC). O sea, más  miseria y más injusticia con el Tercer mundo. Producir menos, y cobrar lo mismo.

Nuevamente, ha sido un periodista amigo el encargado de la propaganda de Sánchez: ¿Hasta qué punto les preocupa que el avance de la extrema derecha termine con el trabajo de la Comisión? Eso permitió a Sánchez responder como todo un estadista

De volver a la disciplina fiscal, nada: cuanto más tarde mejor. Si España propusiera eso, el primer país que caería en la trampa sería... España.

Nuevamente, ha sido un periodista amigo el encargado de la propaganda de Sánchez: ¿Hasta qué punto les preocupa que el avance de la extrema derecha termine con el trabajo de la Comisión? Eso permitió a Sánchez responder como todo un estadista: por favor, ahora estamos hablando de Europa, ya habrá tiempo de hablar de ello. Y mira que lo estaba deseando.