Informa Friday Fax: "EE.UU. se niega a sumarse a la declaración de la Comisión de la ONU sobre la Mujer". Al parecer los representantes de Estados Unidos y de Argentina se opusieron a la ideología de género y defendieron los derechos de las mujeres en la conferencia anual de la ONU sobre mujeres. 

Sus declaraciones estuvieron acompañadas de abucheos por parte del resto de estados progresistas, sobre todo cuando el diplomático estadounidense declaró que era "imposible" para su país apoyar una declaración política adoptada por la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer de la ONU porque contenía terminología de “género”. Y es que desde que Trump ha vuelto a la Casa Blanca, su postura es clara: "sólo hay dos géneros". Por lo que el representante ante la ONU confirmó que únicamente apoyarían una declaración con un "lenguaje claro y preciso que estableciera que las mujeres son biológicamente mujeres y los hombres son biológicamente hombres".

En la misma línea fue el diplomático argentino que aseguró que su país interpretaba el “género en el sentido del Estatuto de Roma”, una referencia a la binariedad biológica hombre-mujer. 

Ambas delegaciones también objetaron la inclusión de un texto sobre “formas interseccionales de discriminación”, entendido ampliamente como un respaldo a las políticas “woke” o de diversidad, equidad e inclusión (DEI).

El aborto también jugó un papel fundamental en estas reuniones: países nórdicos, Canadá y las naciones latinoamericanas se quejaron de que el borrador no incluía términos relacionados con el aborto como “salud sexual y reproductiva y derechos reproductivos”. Y por contra, la Santa Sede, Argentina, Malí, Nigeria y Camerún, lamentaron que el acuerdo final de la comisión no hiciera lo suficiente para promover la importancia de la maternidad, especialmente en el contexto de la familia.

Además de los abucheos, durante las dos semanas que duró la Asamblea, se escucharon referencias como que Trump es “fascista” y una amenaza para la “igualdad de género”. Pero la mayor falta de respeto hacia Estados Unidos, que hasta ahora ha sido el mayor contribuyente de la ONU, ocurrió cuando la comisión anunció que ignorará las objeciones de la administración Trump sobre idología de género por no ser miembro de la comisión este año. Y es que recordemos que el presidente estadounidense ha anunciado su salida de la ONU.

¿Pero saben lo más bello e instructivo de todo esto? Que la presidencia de la comisión está en manos de Arabia Saudita. Recordemos que siendo presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero financió, con nuestro dinero, ONU Mujeres, el repugnante tanque de ideas del feminismo radical y de la financiación del infanticidio, hoy mutado en transexualismo, para dar trabajo y sueldo generoso a su ministra abortera Bibiana Aído. 

Tiene cierta coña, por decir algo, que la comisión se ponga digna y cancele a Estados Unidos por sus declaraciones estando presidida por Arabia Saudí, más cuando ninguno de los 45 países de la comisión se negó que este país que se caracteriza por su defensa y lucha por los derechos de las mujeres, fuera elegido para la presidencia.