Más de un millar de civiles han muerto y hay más de 4,2 millones de ucranianos refugiados en los países vecinos desde el comienzo de la guerra, el pasado 24 de febrero, según datos de la ONU
Ucrania cumple este miércoles 43 días de guerra mientras se van conociendo más detalles de la brutalidad de las tropas rusas contra la población civil en varias zonas de la región de Kiev. Después del hallazgo de centenares de cadáveres en Bucha, las autoridades ucranianas están denunciando la masacre en otras localidades como Borodyanka o Andriivka, recoge RTVE.
Mientras, Ucrania pide más armas a la OTAN y un embargo total de importaciones de gas y petróleo rusos para ayudarle frente a la invasión. "Mi agenda es muy simple, solo hay tres asuntos en ella: armas, armas y armas", ha declarado el ministro de Exteriores de Ucrania, Dmitro Kuleba, a su llegada a la sede de la Alianza Atlántica en Bruselas para participar en la reunión de ministros de la OTAN, recoge RTVE.
Kuleba ha añadido que "en las recientes semanas, el ejército ucraniano y la nación ucraniana entera ha demostrado que sabemos cómo luchar, sabemos cómo ganar, pero sin el suministro sostenible y suficiente de las armas que ha pedido Ucrania, estas victorias irán acompañadas de enormes sacrificios".
"La mejor manera de ayudar a Ucrania ahora es proveerle con todo lo necesario para contener a [el presidente ruso, Vladimir] Putin y derrotar al ejército ruso en Ucrania, de tal manera que la guerra no escale más", ha subrayado.
Por su parte, el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, ha asegurado que trabajan duro para evitar que el conflicto escale, a la vez que ha prometido seguir apoyando a los ucranianos. Este miércoles, Stoltenberg advirtió a los aliados que debían prepararse para que la guerra dure meses o incluso años.
Mientras, Estados Unidos ha anunciado nuevas sanciones contra Rusia como consecuencia de la invasión de Ucrania y la masacre de Bucha. Entre los afectados por este nuevo paquete de medidas se encuentran dos de los principales bancos rusos y dos de las hijas del presidente Vladímir Putin, así como a la mujer del ministro de exteriores ruso, Sergei Lavrov.
Así las cosas, más de un millar de civiles han muerto y hay más de 4,2 millones de ucranianos refugiados en los países vecinos desde el comienzo de la guerra, el pasado 24 de febrero, según datos de la ONU.