Tras la detención en Venezuela por parte de la dictadura de Nicolás Maduro de dos españoles a los que acusa de formar parte del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y de trazar -junto a la oposición venezolana y la CIA- un plan para asesinarlo, el Ministerio de Asuntos Exteriores español ha desmentido tal extremo rotundamente.

"España desmiente y rechaza rotundamente cualquier insinuación de estar implicada en una operación de desestabilización política en Venezuela", ha señalado el Gobierno de España, que ha añadido que "el Gobierno ha constatado que los dos hombres detenidos no forman parte del CNI ni de ningún otro organismo estatal". 

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Los nombres de los dos españoles detenidos son José María Basoa Valdovinos y Andrés Martínez Adasme, que junto a otras doce personas han sido apresadas por la dictadura, acusadas todas ellas de orquestar una "operación de desestabilización", en la que estaría participando la dirigente opositora venezolana María Corina Machado, junto al CNI español y la CIA estadounidense, según el ministro del Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello. 

De esta manera, con acusaciones falsas, la tiranía chavista ya está preparando el procesamiento de María Corina Machado, la verdadera líder opositora -que fue inhabilitada por el régimen para que no pudiera presentarse a las elecciones-, que permanece en Venezuela encabezando la resistencia pacífica contra el pucherazo electoral ejecutado por Maduro el pasado 28 de julio.  

A todo esto, en España, el exiliado Edmundo González, el vencedor de las elecciones del pasado 28 de julio, se reúne hoy lunes con con el expresidente del Gobierno José María Aznar, y mañana martes con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. 

Por cierto que ayer, el Alto Representante de la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, calificó de calificado de "régimen dictatorial" al Gobierno de Venezuela: "Naturalmente, esto es un régimen dictatorial, autoritario, dictatorial, pero con decirlo no arreglamos nada. Lo que se trata es de intentarlo resolver".