La Fundación NEOS ha analizado los resultados que dejaron las elecciones europeas del 9 de junio, en el debate 'Europa: las causas del desorden', presentado por Jose María Beneyto, director del Instituto de Estudios Europeos de la Universidad San Pablo CEU, han participado Juan José Toharia, sociólogo y presidente de Metroscopia; Mariano Gomá, presidente de Foro España Cívica; el presidente de NEOS, Jaime Mayor Oreja, que fue eurodiputado entre 2004 y 2014; José Luis Bazán, asesor de la Comisión de Conferencias Episcopales de la UE; y Florentino Portero, historiador y analista de relaciones internacionales.

Beneyto inauguraba la sesión resumiendo los resultados electorales y asegurando que "Han perdido quienes representaban el buenismo, una cierta utopía en relación, por ejemplo, con el pacto verde o con la apertura de fronteras; frente a esto, una ducha de realidad, una búsqueda de seguridad y estabilidad".

También ha remarcado otro fenómeno "una cierta autonomía por parte de los ciudadanos respecto al discurso dominante, frente a los partidos políticos, con un cierto hartazgo de las políticas buenistas y un realismo más pragmático" y "una cierta vuelta a determinados valores conservadores".

Por su lado Bazán ha puesto el foco en el populismo moral, encarnado en el relativismo ético, que "exige la adhesión militante a la soberanía individual y una aversión al límite moral: hay tantas identidades individuales como deseos o tendencias, tantas formas de familia como la combinatoria permite".

Lamentando que se haya asumido que "el procedimiento democrático es la fuente exclusiva de moralidad social. Las sociedades europeas han adoptado una nueva brújula moral, que no es ya el logos encarnado en la persona de Cristo, ni siquiera la denostada ley natural, ni el sentido común, en vías de extinción".

Mayor Oreja ha cerrado el evento, mostrando su preocupación por las causas del desorden actual: "Estas elecciones europeas son un paso más en el desorden. Hay desorden cuando falta cohesión en la política, la economía y en los fundamentos que hicieron posible la Unión Europea".

"Los europeos nos hemos hecho cómodos, pequeños dioses, individualistas. Hemos perdido el sentido del Bien Común». Pero esta crisis no es solo personal, también se produce en el ámbito público porque "hemos perdido las prioridades, la brújula".

Y ha pedido unión para tratar los verdaderos problemas "demografía, seguridad y defensa, inmigración y la falta de cohesión deben ser las prioridades".

El presidente de NEOS ha concluido que la causa entre las causas de esta crisis es la falta de referencias trascendentes: "La Unión Europea nació para combatir las guerras, la peor expresión de la cultura de la muerte, y hoy se plantea incorporar el aborto como un derecho en la carta fundacional. Hemos vivido como si Dios no existiera".