Decíamos en Hispanidad que la vicepresidenta primera del Gobierno de España y ministra de Economía, Nadia Calviño, se ha vuelto a encontrar con polémicas por su marido: recuerden que Díaz Ayuso llevó a la Fiscalía Europea los contratos del esposo de Calviño por posible tráfico de influencias con los fondos europeos. 

Ahora, el marido de la ministra, Ignacio Manrique de Lara, ha sido nombrado coordinador de estrategia comercial en el Consejo de Administración del Patrimonio Nacional, y ¿de quién depende Patrimonio? en la actualidad lo preside Ana de la Cueva, quien fue secretaria de Estado de Economía de doña Nadia. 

Desde el organismo negaban cualquier tipo de trato de favor hacia Manrique de Lara, alegan que tuvo la "máxima puntuación" en el proceso, al que se presentaron ocho cadidaturas. Calviño decía que se trataba "ataques personales": "Llevo cuatro años y medio escuchando todo tipo de ataques personalizados e injustificados. Patrimonio Nacional ya ha dado información detallada y no tengo nada que añadir". Para entendernos, Nadia aseguraba que las explicaciones tenía que darlas Patrimonio y que ya había dado todas las justificaciones que tenía que ofrecer: es decir, una ex subordinada suya ya había despejado todas las dudas de por qué el marido de su ex jefa es el mejor candidato, ¿comprenden?

Pues bien, según publica El Mundo, Patrimonio Nacional supuestamente ocultó información sobre el concurso al resto de candidatos que competían con el marido de Calviño. Al parecer los otros candidatos consultaron al organismo ciertas dudas y solicitaron información sobre el puesto al que aspiraban para saber si su perfil se adecuaba a los criterios, pero Patrimonio no respondió a las dudas que los candidatos enviaron por email. Así, no se les aportó ni los detalles más básicos como el salario, condiciones laborales, fecha de resolución del proceso, baremación de los criterios, ni si el currículum contaba más que la parte práctica.