El presidente ceutí, Juan Jesús Vivas (PP) vende Ceuta a los musulmanes
La socialista Cristina Pérez, hasta ahora vicepresidenta primera de la Asamblea de Ceuta, ha dejado su cargo, por lo que en la Ciudad Autónoma se tenía que votar la nueva composición de la Mesa. El PP, con Juan Jesús Vivas a la cabeza, ha dividido sus nueve votos entre el PSOE y el partido musulmán Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía, convirtiendo al socialista Melchor León en vicepresidente primero y a Fátima Hamed en vicepresidenta segunda.
Fátima es la misma que se llevó las manos a la cabeza cuando iba a tener lugar una corrida de toros en Ceuta, ojo, por el maltrato animal, lo de la matanza de sacrificar 4.500 corderos por el fin al mes sagrado de ayuno de Ramadán, es diferente. Fiesta musulmana que se celebra en Ceuta gracias a Vivas.
Así lo ha denunciado Vox, que pese a ser la tercera fuerza política de Ceuta, se ha quedado sin el apoyo del PP. Es decir, Vivas ha preferido dar la mesa al partido musulmán y a los socialistas, antes que a Vox.
El @PP_Ceuta ha consumado su traición a Ceuta entregando el control de la Mesa de la Asamblea al islamismo radical, apoyando con sus votos a los candidatos del @PSOE_Ceuta y el @MDyC_CEUTA
— VOX Ceuta (@Vox_Ceuta) December 21, 2023
En @Vox_Ceuta seguimos plantándoles cara. Así de claro lo deja @redondo_pacheco ⤵️ pic.twitter.com/kQxYfslitL
Ya dijimos en Hispanidad que, tras las elecciones autonómicas, Vivas se había quedado muy lejos de la absoluta situada en 13 representantes, por lo que tendría que negociar. Los pactos en democracia son diarios, pero hay que saber elegir a tus socios. El PP con Feijóo al timón día tras día critica a Sánchez por entregar España a los independentistas, pero oye, Vivas entrega Ceuta a los musulmunes, y todo está justificado con tal de librar a los ceutíes del 'influjo de la extrema derecha', algo que lleva haciendo desde el año 2009.
El Gobierno de Sánchez ha abandonado a Ceuta y Melilla, ha dejado las dos ciudadanes autonómicas a merced de los deseos de Mohamed VI, pero Vivas le allana el camino.
España mira hacia otro lado, olvidando a Ceuta y a Melilla y a los 700.000 marroquíes que viven en el país y que continúan sintiéndose, en su mayoría, fieles siervos de un déspota llamado Mohamed VI.
Marruecos quiere hacerse con Ceuta y Melilla, con ofensivas cada vez más agresivas donde usa a su población como carne de cañón. España mira hacia otro lado, olvidando a Ceuta y a Melilla y a los 700.000 marroquíes que viven en el país y que continúan sintiéndose, en su mayoría, fieles siervos de un déspota llamado Mohamed VI.
La situación no es fácil, pero no debemos olvidar que cuando Marruecos dejó las puertas abiertas y cruzaron 8.000 marroquíes a Ceuta, una ciudad con 84.829 habitantes, la respuesta del pepero Juan Jesús Vivas, fue nombrar persona non grata a Santiago Abascal. Juan Jesús, no sé qué haría la ciudad de Ceuta sin ti.
Pero es que para más cachondeo, Sánchez se planta en Ceuta tiempo después, y el presidente de la ciudad autónoma, presa de la cobardía y del síndrome de Estocolmo, en lugar de dar un golpe en la mesa y exigir explicaciones, recibe con todos los honores -"Querido presidente"- a don Pedro.
Tras esto, Marruecos dice que Ceuta y Melilla son marroquíes y nuestro Gobierno, valiente como nadie, responde con una nota verbal diciendo que estamos muy enfadadados: se escucharon las risas de Rabat desde Madrid. Todo ello cuando apenas unos días antes en Melilla se destapaba la supuesta trama de compra de votos por parte del partido pro-marroquí e islamista.
Asimismo, hay que tener muy presente que Ceuta tiene una valla por la que le son 'lanzados' cientos de emigrantes africanos y un ejército de Regulares en su territorio, de cuya lealtad no podemos estar seguros.
No olvidemos que el problema de Ceuta y Melilla, antes que político es religioso: el cristianismo está despareciendo, el islamismo avanzando… y Juan Jesús Vivas delirando. ¿Y si militarizamos ambas ciudades? Parece la única forma de parar a Marruecos, porque si dependemos de Juan Jesús, podemos dar por perdidos a los ceutíes.