En su comparecencia en el Congreso para explicar su programa de Gobierno, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dicho: "Vamos a eliminar los aspectos sobre segregación escolar que arrastra una ley aprobada sin acuerdo como es la LOMCE. Y entendemos que la asignatura de Religión no debe tener valor académico, pero sí crear una asignatura de valores éticos".
Lo cual en la práctica supone pisotear el derecho de los padres a elegir la educación que quieren para sus hijos, tal y como ha reconocido recientemente el Tribunal Constitucional.
Sánchez ha añadido: "Entendemos que la asignatura de Religión no debe tener valor académico, pero sí crear una asignatura de valores éticos”.
"Queremos acabar con el aumento desmedido del número de alumnos por aula. Y nos planteamos dejar de hablar de fracaso escolar: ¿cómo puede fracasar alguien de 12 años, un niño que en su casa solo pasa privaciones?", ha añadido.