Vivimos en un mundo que va demasiado deprisa y en el que se consume a toda velocidad, por ejemplo, en el tema textil, acumulando un gran número de prendas que ya no usamos en nuestros armarios, pero no hay que tirarlas, porque pueden tener una nueva oportunidad. Por ejemplo, a través de Moda re-, una cooperativa de iniciativa social sin ánimo de lucro de Cáritas Española que da una segunda vida a más de 40 millones de kilos de ropa, calzado y complementos de segunda mano, y además, crea empleo y fomenta la inserción laboral de personas en riesgo de exclusión social.

Cáritas tiene una larga experiencia de más de 30 años en recogida y gestión de ropa con fines sociales y solidarios, a través de los tradicionales roperos de las parroquias. Esta experiencia ha necesitado actualizarse y empezó a servir también para luchar contra la exclusión social, ante el convencimiento de que el trabajo es la mejor herramienta para hacerla frente, a través de proyectos locales de gestión de ropa y desechos textiles que empezaron a trabajar de forma conjunta hace más de cuatro años y dando lugar en 2020 a la constitución de Moda re-, una cooperativa de iniciativa social para agrupar las empresas de inserción sociolaboral del sector textil de Cáritas.

Cada año recoge más de 40 millones de kilos de ropa, calzado y complementos de segunda mano a través de los cerca de 7.000 contenedores que tiene en las calles y en localizaciones privadas (colegios, centros de salud, supermercados…)

tienda de Moda re-

 

Moda re- compagina la apuesta por la sostenibilidad y la economía circular con la cuestión social y solidaria, y con una triple misión: favorecer el acceso al mercado laboral a personas en situación o riesgo de exclusión, gestionar y dignificar la entrega social de ropa a familias con escasos recursos económicos, y dar a la ropa recogida el mejor tratamiento posible. Entre sus valores están, entre otros: la caridad; la centralidad de la persona, defendiendo su dignidad e impulsando sus capacidades e integración; la búsqueda de la verdad a la luz de la fe; el trabajo por la justicia social; la participación activa; la solidaridad; y la austeridad.

Esta cooperativa se dedica a la gestión del círculo completo de la ropa usada (recogida, preparación para reutilización, reciclaje, donación y venta) y lo hace generando empleo social y sostenible, y apostando por el consumo responsable con campañas de sensibilización. Cada año recoge más de 40 millones de kilos (o lo que es lo mismo, más de 40.000 toneladas) de ropa, calzado y complementos de segunda mano a través de los cerca de 7.000 contenedores que tiene colocados en las calles y en localizaciones privadas (colegios, centros de salud, supermercados…), y de ahí el material se envía a una de las tres plantas de tratamiento integral que tiene (ubicadas en Valencia, Barcelona y Bilbao), donde se clasifica, selecciona e higieniza. Sólo la labor de la recogida y el tratamiento de las prendas genera unos 1.200 empleos, de los cuales la mitad están reservados a personas en situación o riesgo de exclusión social. Estas cifras convierten a Moda re- en el mayor operador de España y en uno de los proyectos de reutilización y preparación para el reciclaje con mayor proyección a nivel europeo.

Las prendas, zapatos y complementos que están en perfectas condiciones se destinan a las más de 120 tiendas de segunda mano de Moda re-, donde se ponen a la venta para todos los públicos y se entregan de forma digna a familias vulnerables 

Cáritas e inserción laboral a través de la recogida textil

 

Las prendas, zapatos y complementos que están en perfectas condiciones se destinan a la red de más de 120 tiendas de segunda mano de Moda re-, repartidas entre 84 ciudades, donde se ponen a la venta para todos los públicos y se entregan de forma digna a familias vulnerables (estas últimas ascendieron a 209.700 prendas en 2021). A estos productos reutilizados se suman prendas procedentes de excedentes y donaciones de empresas. Además, se trata de una iniciativa social que tiene sostenibilidad económica a través de dichas tiendas, pues todos los beneficios que generan se destinan al propio desarrollo y crecimiento del proyecto. Mientras que el material recogido que por su composición o estado no se puede reutilizar, se recicla y se convierte en trapos industriales o en material de aislamiento acústico o térmico.

A la vista de todo esto Moda re- se puede resumir como una iniciativa que apuesta por la inserción laboral, la economía circular y el consumo responsable, aspectos que no son nada desdeñables teniendo en cuenta que en 2021 había 13,1 millones de personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social en nuestro país y que se estima que cada año unas 990.000 toneladas de textiles van a parar a los vertederos, pues solo el 12% de la ropa se reutiliza y/o recicla.