El clasicismo ganó a la sordidez. 'Oppenheimer' se alzó con siete estatuillas, en las principales categorías, frente a 'Pobres criaturas' que consiguió cuatro
Afortunadamente no ha habido sorpresas en la nonagésimo sexta Edición de la Gala de la Academia de Hollywood la rotunda ganadora ha sido 'Oppenheimer' que se ha llevado siete Oscar (tenia 13 nominaciones) frente a su más directa rival, Pobres criaturas, que ha obtenido cuatro (de las 11 por las que había sido nominada). Y este reconocimiento es una excelente noticia porque el director británico Christopher Nolan ha hecho una magnífica película sobre el padre de la bomba atómica, Robert Oppenheimer, mientras que Pobres criaturas es otra “chaladura sórdida” del director Yorgos Lanthimos.
La mencionada Oppenheimer es un thriller que supone un árido recordatorio de las consecuencias y peligros de la carrera armamentística pero también una historia de sentimiento de culpa y de arrepentimiento. Visualmente impresionante, la película ha obtenido merecidamente los Oscar más importantes; a mejor película y director, aunque también ha reconocido el trabajo interpretativo en las categorías de mejor actor principal (Cilliam Murphy) y de reparto (Robert Jr. Downey).
Mientras que el Óscar más importante obtenido por Pobres criaturas ha sido a mejor actriz para Emma Stone, haciendo de una versión femenina y promiscua de una especie de Frankenstein, que le ha ganado el pulso a la magnífica interpretación contenida (algo más complicada) de Lily Gladstone, la protagonista femenina de 'Los asesinos de la luna'. Se trata de la última película del veterano director Martin Scorsese, que se ha ido de vacío en estatuillas (partía de 10 nominaciones) una película excelente, y de corte clásico, que narra un relato de avaricia y racismo que tuvo como víctimas a los integrantes de la comunidad indígena de los Osage y que es, sin duda, uno de los capítulos más oscuros de la Historia de Estados Unidos.
En esta edición se van también sin premios las películas españolas La sociedad de la nieve, nominada a Mejor película de habla no inglesa (la ganadora ha sido La zona de interés), y Robot Dreams, reconocida en la candidatura de Mejor película de animación que ha perdido ante un peso pesado en este campo, el japonés Hayao Miyazaki y la preciosa El chico y la garza, film con el que se despide profesionalmente con una carrera llena de largometrajes maravillosos.
No es casual que cuando vivimos, a nivel mundial, una etapa bélica tan terrible con guerras en Ucrania y Oriente Medio ( y las invisibles en otros continentes como África), se haya alzado como la gran ganadora Oppenheimer, que se cuestiona la forma de acabar conflictos utilizando la bomba atómica. Así mismo, resulta curioso que una película que vuelve al tema del Holocausto, La zona de interés, haya ganado dos Óscar: a Mejor guión adaptado y Mejor película de habla no inglesa. Una película presentada por Reino Unido que aborda la denominada banalidad del mal en imágenes describiendo la vida cotidiana, y llena de comodidades, de la familia del comandante de Auschwitz Rudolf Höss, al lado de ese campo de exterminio.