José Ignacio Munilla, durante su intervención
José Ignacio Munilla ha salido al paso para resolver las dudas generadas por la respuesta del prefecto de la Doctrina de la Fe, el cardenal Víctor Manuel Fernández, a la ‘dubia’ de cinco cardenales sobre la bendición de uniones homosexuales por parte de la Iglesia. La respuesta es tan nítida como directa: no puede.
“El Santo Padre está diciendo que la Iglesia no tiene poder para impartir la bendición a las uniones homosexuales, no es que no quiera (…), es que no tiene autoridad la Iglesia y no puede cambiarlo”, asegura. El obispo de Orihuela-Alicante disipa cualquier género de duda incluso de aquellos que han puesto sus esperanzas ‘aperturistas’ en la actual reunión sinodial: “No puede venir un sínodo y cambiarlo, ni un concilio ni el Papa siguiente”, declara. “Sería una quiebra del magisterio de la Iglesia”, sentencia.
En el vídeo explicativo, Munilla va al fondo de la cuestión y se remonta a la respuesta que dio en febrero e 2021, el prefecto emérito de la Doctrina de la Fe, el cardenal español Luis Francisco Ladaria, a las ‘dubias’ presentadas entonces. Una respuesta que fue ratificada por el Papa Francisco y que Munilla sintetiza de la siguiente guisa: “Dios bendice a los pecadores, no bendice al pecado”, y también: “Dios puede tener paciencia en nuestro caminar, pero no puede bendecir un camino que vaya en la dirección equivocada”, afirma.
Munilla acude a las fuentes, esto es, al Evangelio: “Jesús acogió a aquella mujer pecadora, podríamos decir que bendijo a aquella mujer pecadora a la que querían apedrear. Jesús le dijo: tampoco yo te condeno, vete y no peques más. Jesús bendijo a aquella mujer, pero no bendijo la vida promiscua que tenía (…) Jesús no le dijo: vete y tráeme a tus parejas que os voy a bendecir. No, eso no lo dijo”, explica.
El obispo acude también al Catecismo: “De la misma forma que el Catecismo dice que las personas homosexuales deber ser acogidas con respeto (…), dice también, con respecto a los actos homosexuales que son intrínsecamente desordenados, contrarios a la ley natural (…), que no pueden recibir la aprobación en ningún caso”, aclara.
En definitiva, la Iglesia no puede bendecir las uniones homosexuales ni ahora ni nunca. Y el que afirme que sí se equivoca gravemente. Vean el vídeo. Merece la pena.