Dos años después de que el virus llegara desde China vuelve el chiste de la gripe: se cura en una semana con medicamentos y en siete días sin ellos
El español medio, Juan Español, busca la manera de normalizar el Covid, de gripalizarlo, con la sospecha, al menos algunos, de que eso es lo que debió hacer desde un principio. Y cuando el señor Malone, que algo tiene que ver con el origen de las vacunas, dice, no que estas sean negativas sino que ha sido apresuradas, exageradas y hacen dudar a la ciencia médica sobre los remedios aplicados… pues a lo mejor tiene razón.
Lo que ha ocurrido con el Covid sólo puede definirse como histeria, hay enajenación colectiva. Dos años después de que el virus llegara desde China vuelve el chiste de la gripe: se cura en una semana con medicamentos y en siete días sin ellos.
Pero es que sigue habiendo muertos. Claro, y de un montón de enfermedades también.
Es verdad que la primera oleada, la de marzo de 2017, fue realmente letal. La segunda y tercera, ya antes de que se aplicaran las mismas vacunas, lo fueron mucho menos.
La primera ola fue realmente letal, las otras, también antes de las vacunas, se convirtieron en gripes
En conclusión, nos nos han salvado las vacunas, nos ha salvado nuestro sistema inmunológico, aunque no digo que las vacunas no lo hayan movilizado un tanto. Y en mientras, seguimos sin saber nada del virus.
Es lo mismo: Carolina Darias acaba de comentarnos que los contagios crecen: no sueltes la cadena. ¡Ah!, por supuesto, la ministra Darias asegura que todo el mérito escde las vacunas. Pero sólo es porque a la ministra Darias le importa más bien poco la enfermedad. Lo que le importa es que quede claro que el Gobierno ha triunfado ante el Covid.
Es lo mismo: Carolina Darias acaba de comentarnos que los contagios crecen: no sueltes las cadenas
¡Ah! y además, nos vende, como resultado de la lucha contra el Covid, nada menos que un teléfono para atender a todos los suicidas potenciales. No nos han curado el Covid -seguimos sin saber nada del virus- pero ahora Carolina nos va a curar la locura depresiva. Primero nos sanó el cuerpo, ahora nos sana el alma: ¿no es hermoso?