Cuando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, nombró a Dolores Delgado fiscal general del Estado, la polémica no se hizo esperar, Lola fue ministra de Justicia de Pedro, pero eso, según los socialistas, no comprometía su imparcialidad. Aunque recordemos aquellas palabras del presidente: ‘¿La Fiscalía de quién depende?, ¿de quién depende? Pues ya está’. 
Los escándalos de Lola han crecido y se van acumulando.

Este martes, el Tribunal Supremo anulaba por unanimidad uno de los nombramientos de la fiscal general del Estado, Dolores Delgado. La Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo ha estimado los recursos de casación interpuestos por la Asociación de Fiscales (AF) y el fiscal de Sala José Miguel de la Rosa, contra el nombramiento de Eduardo Esteban como fiscal de Sala coordinador de Menores.

La designación de Eduardo Esteban fue impugnada por la AF y el fiscal De la Rosa al considerar que la designación no estuvo lo suficientemente motivada y que el citado nombramiento fue arbitrario al existir otro candidato que sí tenía especialización en la materia. Pero, aunque Esteban no tenga esperiencia en la materia, sí perteneció a la Unión Progresista de Fiscales, asociacion a la que perteneció Lola, ¿eso no se tiene en cuenta como mérito? Hasta dónde vamos a llegar...

Este revés se suma a las polémicas que acumula la fiscal general del Estado.

La pasada semana el Gobierno decidió ‘colar’ entre las enmiendas a la ley concursal una que establece que si el fiscal general del Estado es miembro de la carrera fiscal, adquirirá la categoría de fiscal de Sala del Tribunal Supremo una vez sea cesado del cargo. De salir adelante esta modificación, posibilitaría que la actual fiscal general Dolores Delgado fuera fiscal de Sala del Supremo cuando abandone el cargo. Así, el Gobierno se inventaba una ‘puerta giratoria pública’ para premiar los servicios de Lola.

El pasado mes de marzo, la Asociación de Fiscales y la Asociación Profesional Independiente de Fiscales, pedían la dimisión de Lola, al considerar que “debió abstenerse” en el conocido como ‘caso Stampa’, cosa que no hizo. El caso que investigaba el fiscal Ignacio Stampa (Tandem) -desde hacía casi cuatro años- tenía varios investigados y el dueño del despacho que defendía a varios de los principales investigados había sido un famosísimo magistrado de la Audiencia Nacional –Baltasar Garzón-, pareja de la actual Fiscal General del Estado, Dolores delgado. 

Lola tiene otro frente abierto con la Fiscalía de la Unión Europea. Delgado, matón del Ejecutivo, insiste en atacar a quien el PSOE considera la alternativa realmente peligrosa: Díaz Ayuso. Y esto le está costando un enfrentamiento con la fiscal general Europea, Laura Codutra Kovesi, quien ha expresado su "preocupación", y cuestiona que Delgado se haya saltado la ley en una decisión "parcial" y que "desafía la supremacía" del derecho de la UE, al negarse a trasladar el caso a la fiscalía europea. 

Si nos remontamos al año 2020, debemos recordar que, la fiscal general entregó, por anticipado, la memoria de la Fiscalía a Sánchez, que la recibía en la Moncloa. Un gesto de sumisión ante el Ejecutivo, pero es que el presidente ya dejó claro a quién pertenecía la Fiscalía. 

Pobre Lola, la han tomado contra ella.