
La alcaldesa de Teruel y senadora del PP, Emma Buj, ha interpelado directamente a la ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, sobre el escándalo protagonizado por el ex ministro José Luis Ábalos en el Parador de Teruel tras destrozar una habitación tras una fiesta con prostitutas en plena pandemia.
La alcaldesa de Teruel (@emma_buj) confirma que el Gobierno AMENAZÓ a los trabajadores del Parador de Teruel, para que no contaran los detalles de la juerga del ministro del PSOE.pic.twitter.com/htZX7J1mmX
— Willy Tolerdo (@WillyTolerdoo) April 22, 2025
«Tienen ustedes escándalos por corrupción, sexo y ahora la ley del silencio. ¿En qué momento dejaron de parecerse a un partido y empezaron a parecerse a una mafia? Señora Alegría, usted que es tan socialista, díganos, ¿defiende a los trabajadores del Parador de Teruel que han sido amenazados de despido por contar lo que allí ocurrió o defiende al señor Ábalos? ¿Está usted con los trabajadores amenazados de despido o con el señor Ábalos y Koldo?», le preguntaba Buj a Alegría.
Por su parte, Alegría ha recordado que en los últimos días ha recibido mensajes de «distintos dirigentes de todos los partidos a excepción del PP«, al que ha reprochado que condene »siempre con peros«. Pero entre esos mensajes de apoyo también hubo uno de Casado, al que se ha referido como el «dirigente del PP al que tiraron por el balcón cuando se atrevió a denunciar la corrupción en la Comunidad de Madrid«, que gobierna Isabel Díaz Ayuso.
Buj ha respondido que su partido «condena los insultos machistas a la izquierda y a la derecha, no como ustedes, que sólo se defienden a sí mismos».
La ministra ha vuelto a negar esos hechos y ha incidido en que la campaña contra ella la iniciaron «bots anónimos» en redes sociales, pero ha lamentado especialmente que fuera el PP de Aragón el que activara «el botón del ventilador del odio» profiriendo «mentiras» y que lo hiciera con el «amparo» del PP nacional que dirige Alberto Núñez Feijóo. Alegría ha acusado en todo momento a Jorge Azcón, su próximo rival en las elecciones autonómicas, de incitar esos insultos.