Decíamos ayer que ocho menas de la Casa de Campo fueron detenidos por amenazas y lesiones tras descubrir la Policía que robaban en autocaravanas. Les acusaron de lesiones a dos vigilantes de seguridad y de amenazas de muerte a la directora y a la subdirectora del centro.

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En la misma zona, conocemos la noticia de que un perro defendió a su dueña de un intento de robo sufrido hace unos días en la Casa de Campo de Madrid perpetrado por un mena marroquí acogido en el centro de menores de Batán. La víctima presentó una denuncia ante la Policía Nacional después de que el mena intentará arrancarle el móvil que llevaba colgado al cuello con una cadena.

No obstante, debido al grosor de la cadena, el mena no pudo arrebatarle el teléfono y el animal, al ver a su dueña en peligro, se lanzó contra él y le mordió en el brazo, lo que provocó que huyera dolorido a la carrera. En este sentido, gracias a la descripción que facilitó y las marcas de mordida, los agentes localizaron al sospechoso en el centro de menas de la Casa de Campo.

Según fuentes policiales, el agresor ya tenía antecedentes penales, concretamente cuatro detenciones previas desde que llegó a España.

Recordar que la Comunidad de Madrid prometió cerrar ese centro de menores, pero finalmente lo descartó ante el aumento de número de menas llegados a España en los últimos años.