Víctor Madrigal-Borloz está muy preocupado con la libertad religiosa... demasiada libertad religiosa
Naciones Unidas está más activa -y agresiva- que nunca y no precisamente para bien. Un ejemplo de esto se puede ver en su web, que abre con un artículo con motivo del Día Mundial de la Población (11 de julio), titulado “La respuesta está en los derechos y las opciones”. “La pandemia ha dado lugar a una merma en la efectividad de la atención sanitaria y más especialmente en la salud sexual y reproductiva”, comienza diciendo el artículo. Es decir, hay que retomar y acelerar las campañas pro-aborto para recuperar el tiempo perdido en el que han nacido más niños de lo previsto, algo que perjudica seriamente al planeta.
Es un ejemplo que muestra la agresividad de Naciones Unidas para implantar los postulados del Nuevo Orden Mundial. Y ahora lo anuncia, además, sin tapujos porque el NOM ha logrado instaurar el consenso del que tanto hemos hablado en Hispanidad y que es mucho más peligroso que una conspiración.
En esta línea agresiva, el experto independiente de la ONU en asuntos LGTBI, Víctor Madrigal-Borloz, anunció recientemente que está preparando un informe sobre el enfrentamiento entre la libertad religiosa y los postulados LGTBI, que presentará en 2022, según C-Farm, que informa sobre el terreno.
Hemos pasado del relativismo -nada es bueno o malo, todo depende del ángulo desde el que se mire- a la blasfemia contra el Espíritu Santo: lo bueno es malo y lo malo es bueno. La libertad religiosa es mala malísima porque atenta contra los postulados LGTBI, ahora elevados a derechos, y es, por tanto, perseguible.
En otras palabras, Madrigal-Borloz se propone acelerar el ataque global, no ya contra la Iglesia, sino contra los católicos. Es la hoja de ruta del NOM, que Naciones Unidas está llevando a cabo punto por punto. No en vano, la ONU, y ahora también la OMS, es uno de los instrumentos más sobresalientes del NOM.
Previo a este informe, concretamente, este mismo verano, el tolerante Madrigal-Borloz publicará una lista negra con todos aquellos que se oponen a la agenda LGTBI.